El hombre de 35 años que retenía en el aeropuerto de Hamburgo a su hija de 4 años tras una disputa con su mujer por la disputa de la misma se ha entregado a la autoridades según ha confirmado la propia Policía.
El sospechoso, que ayer entró hasta la pista de aterrizaje con un vehículo en el que había secuestrado a su hija, ha obligado a cancelar todos los vuelos desde las 20:00 de ayer. Las autoridades habían pedido a los pasajeros que no se acercasen al aeropuerto, que es el quinto con más salidas de todo Alemania y cuenta con vuelos a gran parte de las principales ciudades europeas.
El secuestrador, que accedió al aeropuerto con un coche modelo Audi al que había quitado las matrículas, había pedido volar a Turquía con su hija. Usando una cuenta de correo falsa logró concertar una cita con su exmujer y fue ahí, detalla el Bild, donde secuestró a su hija.
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En el transcurso de estas 18 horas ha realizado varios disparos, por lo que se presumía que iba armado, y ha hecho explotar varias botellas que había preparado con líquido inflamable. Todas las aerolíneas que se encontraban embarcando en ese momento tuvieron que desalojar a sus pasajeros.
La Policía había desplegado drones y equipos antiexplosivos ante la posibilidad de que contase con más artefactos. Para el domingo estaban previstos un total de 286 vuelos que debían traer o llevar a otros destinos desde la ciudad germana a cerca de 36.000 pasajeros. Por el momento, no se ha anunciado la reapertura del aeropuerto.
Esta madrugada la propia policía había declarado que las conversaciones habían sido positivas. La Policía alemana ha estado apostada en las afueras del aeropuerto durante toda la noche preparando una incursión que no ha sido necesaria.
El aeropuerto de Hamburgo ha sido objeto de diferentes situaciones anómalas a lo largo de los últimos meses. Este año, varios activistas climáticos accedieron a las instalaciones obligando a cancelar varios vuelos.
En octubre, después de que estallase la guerra entre Israel y Hamás, se tuvo que detener el flujo de despegues y aterrizajes debido a una amenaza de ataque en un avión que cubría la línea entre Teherán y Hamburgo.