Bruselas

En paralelo al ataque conjunto lanzado por Estados Unidos y Reino Unido contra los rebeldes hutíes en Yemen, la Unión Europea ultima su propia misión militar naval para "escoltar y proteger" a los buques mercantes que atraviesan el mar Rojo. En la operación europea, que podría empezar a desplegarse a finales de febrero, participarán al menos tres fragatas. La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha anunciado este viernes que España no participará en esta operación.

La misión de la Unión Europea en el mar Rojo ha sido propuesta por el Alto Representante para la Política Exterior y de Seguridad Común, Josep Borrell. Borrell ha optado por esta fórmula después de que el Gobierno de Pedro Sánchez vetara a finales de diciembre extender el mandato de la misión antipiratería Atalanta para hacer frente a los problemas de seguridad en el mar Rojo

Sánchez se ha excluido además de la operación 'Guardianes de la Prosperidad' liderada por Estados Unidos, pese a que el Departamento de Defensa norteamericano anunció inicialmente la participación de España. En esta misión sí están otros Estados miembros de la UE como Alemania, Italia, Bélgica, Dinamarca y Países Bajos.

[Los rebeldes hutíes de Yemen tras el ataque de EEUU y Reino Unido: "La batalla será más grande"]

De hecho, Países Bajos ha sido uno de los países (junto con Australia, Baréin y Canadá) que han prestado apoyo logístico a los bombardeos lanzados por Estados Unidos y Reino Unido contra objetivos militares de las zonas controladas por los hutíes en Yemen.

Los preparativos para lanzar la misión de la Unión Europea en el mar Rojo han comenzado esta misma semana y se discutirán a nivel ministerial en el Consejo de Asuntos Exteriores que se celebra el próximo 20 de enero en Bruselas. Su formato y mandato exactos deben ser aprobados por unanimidad por los 27 Estados miembros. España ya ha informado de que aunque no participe no la vetará.

Bruselas ha condenado desde el principio los ataques de los rebeldes hutíes contra buques comerciales y ha denunciado que se trata de violaciones del derecho internacional que constituyen una amenaza a la seguridad marítima y a la navegación.

"Es obvio que la UE tiene interés en restablecer la seguridad del tráfico naval en el área del mar Rojo, que es un canal comercial muy importante", ha dicho el portavoz de Exteriores, Peter Stano.

En una visita a Portugal el pasado 3 de enero, Borrell explicó que el mandato de la misión europea sería "escoltar y a proteger los barcos mercantes que pasan por el Estrecho de Bab el-Mandeb".

"Vamos a presentar a los Estados miembros una propuesta para crear una misión que pueda contribuir a la seguridad en el mar Rojo, sabiendo que eso también requiere la unanimidad y unos trámites que tienen que ser cubiertos y que no se pueden resolver de la noche a la mañana", relató el jefe de la diplomacia comunitaria.