Zelenski en la Conferencia de Seguridad de Múnich

Zelenski en la Conferencia de Seguridad de Múnich EFE

Europa

Avdivka, la "importante victoria" de Rusia con la que Zelenski quiere despertar a Occidente

El presidente ruso expresó su "gratitud" a las tropas por la mayor victoria militar de Rusia en casi un año. 

18 febrero, 2024 01:27

Volodímir Zelenski sabe que perder Avdivka puede cambiar el curso de la guerra... a su favor. Tirando de refranero español, el "no hay mal que por bien no venga" es la baza que pretende jugar el presidente ucraniano después de que Rusia se haya anotado este fin de semana su mayor victoria militar desde que conquistó Bakhmut hace casi un año. 

Durante las primeras semanas de la invasión rusa, de la que se cumplirán dos años en los próximos días, Zelenski criticaba con dureza a los países aliados, acusándoles de abandonar a su país a su suerte ante el avance de Putin. Ahora, 24 meses después, su estrategia es mucho más sutil y deja que los hechos hablen por sí mismos. Zelenski sabe que Europa le ve como el último muro de contención a Putin, y quiere aprovecharlo.

El líder ucraniano se encuentra desde el viernes en la Conferencia de Seguridad de Múnich. Allí le ha pillado la decisión de su ejército de retirarse de Avdivka tras muchos meses de batalla constante. Los estrategas militares vieron que la ciudad, a la que Rusia había logrado cortar el suministro y la tenía bajo asedio, estaba a punto de ser rodeada por entero. Era el momento de asumir la derrota y replegarse.

Volodímir Zelenski, en la  Conferencia de Seguridad de Múnich.

Volodímir Zelenski, en la Conferencia de Seguridad de Múnich. Reuters

Horas después, Zelenski comparecía en la Conferencia de Seguridad. Sin mencionar una derrota que estaba en la mente de todos, el líder ucraniano miró a los líderes occidentales y les dijo: "Desafortunadamente, mantener a Ucrania en un déficit artificial de armas, particularmente en artillería y capacidad de largo alcance, permite a Putin adaptarse a la intensidad actual de la guerra".

Poco más había que decir. Por un lado, dejaba caer la crítica a los aliados por no estar suministrándole el apoyo prometido. Por otro, les subrayaba que la única forma de frenar el avance ruso es por la vía militar. Las continuadas sanciones de la Unión Europea y Estados Unidos apenas han tenido efecto en los más de 700 días de conflicto.

Pero por si no había quedado suficientemente claro, Zelenski añadió: "Si tu (rango de) artillería es de 20 kilómetros, pero el de Rusia es de 40 kilómetros, ahí está la respuesta".

Europa recoge el guante

La claridad de los hechos forzó a reacciones de algunos líderes continentales. El primer ministro danés, Mette Frederiksen, admitió el reproche velado: "Deberíamos haberos apoyado mucho más desde el mismo inicio de esta guerra, porque Ucrania no puede ganar una guerra sin armas. Las palabras simplemente no son suficientes", admitió.

El factor defensivo y armamentístico también fue subrayado por el ministro de Economía alemán, Robert Habeck, quien apuntó que Europa debería haber multiplicado su inversión en la industria de defensa cuando empezó el conflicto en el vecino europeo.

El presidente germano y anfitrión del evento, Olaf Scholz, resumía bien con una pregunta retórica la cuestión que Zelenski aspira a que retumbe en los cerebros de los líderes occidentales: "¿Hacemos todos lo suficiente para señalar a Putin que estamos preparados para el largo plazo? ¿Hacemos lo suficiente, cuando todos sabemos lo que significaría una victoria rusa en Ucrania?". Redundó en la idea, indicando que "sin seguridad, lo demás no vale nada", y recordó la firma el viernes del documento bilateral con Ucrania en el que compromete a Alemania a apoyar la independencia ucraniana "durante el tiempo que haga falta". 

"La ayuda militar ya prestada y prevista por Alemania asciende a 28.000 millones de euros. Para el año en curso, casi hemos duplicado nuestra ayuda militar hasta superar los 7.000 millones de euros. A ello se añadirán compromisos para los próximos años por un total de 6.000 millones de euros", apuntaba Scholz antes de señalar al resto de socios de la Unión: "Me gustaría mucho que se tomaran decisiones similares en todas las capitales europeas".

Y, aunque no sea una capital europea, sí se recogió el guante desde el alma de la Unión Europea, la Comisión. Su presidenta, Ursula von der Leyen, anunció que presentará en tres semanas una estrategia industrial de defensa para aumentar y optimizar el gasto en este apartado. 

Von der Leyen ha anunciado también su intención de crear una oficina de innovación para la defensa en Ucrania, y ha querido integrar a este país en los programas defensivos del bloque comunitario, ya que Rusia está "superando a Ucrania" en soldados y "lanzando armas rápidas y sucias producidas en Corea del Norte e Irán".

"Tenemos que ser más inteligentes de los rusos. Usar armas de gran precisión. Mientras (el presidente ruso, Vladímir) Putin sacrifica permanentemente soldados en el frente en Ucrania cada vida es sagrada", dijo.

Biden culpa al Congreso

Zelenski mantuvo el sábado una reunión bilateral con la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, aunque previamente había recibido la llamada de Biden para mostrarle su apoyo tras la caída de Avdivka.

La número dos estadounidense dijo que su país apoyará a Ucrania "el tiempo que sea necesario", que continuarán sus esfuerzos "para asegurar una paz justa y duradera" y que trabajarán "para que Rusia pague los daños a Ucrania" cuando acabe la guerra. 

"El presidente Biden y yo continuaremos trabajando para asegurar los recursos y las armas que necesita para tener éxito", dijo. "Estaremos con usted todo el tiempo que sea necesario", agregó.

Una declaración de la Casa Blanca reiteró la necesidad de que el Congreso apruebe urgentemente el paquete para reabastecer a las fuerzas ucranianas.

La Casa Blanca admitió que la retirada de Avdivka se había visto obligada a Ucrania "por la disminución de los suministros como resultado de la inacción del Congreso", que había obligado a los soldados ucranianos a racionar municiones y resultó en "las primeras ganancias notables de Rusia en meses".