La Eurocámara consuma un brusco giro a la derecha. El Partido Popular Europeo (PPE) es el gran ganador de las elecciones europeas que concluyen este domingo en los 27 Estados miembros, mientras que los partidos de derecha radical y extrema derecha suben hasta copar prácticamente el 20% de los escaños, según la primera agregación difundida por el propio Parlamento Europeo basada en estimaciones y sondeos a pie de urna. Los ultras ganan en Francia y Austria y son segundos en Alemania, Polonia y Países Bajos.
Los resultados definitivos no empezarán a conocerse hasta las 11 de la noche, hora en la que cierran los últimos colegios electorales en Italia. Un total de 360 millones de personas en toda la UE estaban convocadas a las urnas para elegir a 720 eurodiputados (15 más que en 2019), que determinarán la orientación política de la próxima legislatura 2024-2029. La participación se ha situado en el 51%.
Según esta primera agregación, el PPE (en el que milita Von der Leyen) ha ganado de manera holgada con el 25% de los votos y 181 escaños, 5 más que en las anteriores elecciones de 2019. En segunda posición se sitúan los socialistas europeos (S&D), que sumarían el 18,7% de los votos y un total de 135 escaños, cuatro menos que en 2019. Caen los liberales de Renew (hasta los 82 escaños, frente a los 102 actuales) y los Verdes (53 escaños, frente a los 72 actuales).
Elecciones Europeas
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La gran novedad es el auge de las fuerzas de derecha radical. En su pugna interna, el ganador es el grupo de los Conservadores y Reformistas Europeos (ECR), liderado por la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, y en el que militan también Vox y los polacos de Ley y Justicia: conseguirían el 9,8% de los votos y 71 escaños, frente a los 69 actuales.
El segundo grupo de ultraderecha en la Eurocámara, Identidad y Democracia, que tiene como jefa a Marine Le Pen, es el que más sube con 62 eurodiputados (y 8,6% de los votos), frente a los 49 actuales. En Identidad y Democracia están también la Liga de Matteo Salvini, el PPV de Geert Wilders o el FPÖ austríaco. Finalmente, en el grupo de los No Inscritos, Alternativa para Alemania (segunda fuerza en su país) logra 17 escaños, mientras que el Fidesz de Viktor Orbán aportaría otros 9 diputados.
Estimación del reparto de escaños elaborada por el Parlamento Europeo a base de sondeos
Aunque en la UE son los Gobiernos nacionales -y no la Eurocámara- los que acaparan una mayor cuota de poder y marcan la dirección política, este viraje a la derecha complicará la aprobación de nuevas normas verdes y de lucha contra el cambio climático, como ya se vio en la recta final de la legislatura. Y podría traducirse en un endurecimiento adicional de la política migratoria, la otra prioridad que suscita un consenso absoluto entre fuerzas por lo demás muy divididas entre sí. El peor escenario sería que los ultras logren una minoría de bloqueo capaz de paralizar la Eurocámara.
La primera prueba de fuego será la votación sobre la presidenta de la Comisión. Von der Leyen necesita en primer lugar que los líderes europeos la designen (por mayoría cualificada) en la cumbre del 27 y 28 de junio. Y a continuación debe ser ratificada por mayoría absoluta (361 votos) en la nueva Eurocámara, en una votación (secreta) que se celebrará probablemente el 18 de julio.
Populares, socialistas y liberales (la 'gran coalición' que le ha sostenido durante su primer mandato) sumarían en principio 398 votos, en teoría suficientes para la elección de Von der Leyen. Pero en Estrasburgo no impera la disciplina de partido y se esperan muchas defecciones. En 2019, la alemana fue confirmada por un margen de apenas 9 votos.
Según las encuestas a pie de urna, el Gobierno de coalición de Olaf Scholz sufre un fuerte revés de los votantes. Los socialistas quedan relegados a tercera posición (con un 14% de los votos y 14 escaños), por detrás de los democristianos (que ganan con el 29% de los votos y 30 escaños) y de Alternativa para Alemania.
En Francia, Marine Le Pen arrasa con un 31,5% y 30 escaños, el doble que la lista de los liberales de Emmanuel Macron (15% y 14 escaños). Los socialistas quedan terceros (14% y 13 escaños) a escasa distancia del presidente y por delante de la izquierda radical de la Francia Insumisa.
Los ultras del FPÖ ganan en Austria con el 27% de los votos y 6 escaños. Superan a los democristianos, que obtienen el 23% de los votos y 5 eurodiputados, empatados con los socialistas. En Países Bajos, la coalición de socialistas y verdes se sitúa en primera posición con el 21% de los votos y 8 escaños, mientras que el partido de extrema derecha de Geert Wilders ha quedado segundo con el 17,7% y 7 escaños.
El hemiciclo de la Eurocámara en Bruselas se ha transformado para la noche electoral en un gran plató de televisión, con más de un millar de periodistas acreditados para seguir en directo el recuento. En cuanto lleguen los primeros datos, está previsto que comparezca la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, la mujer más poderosa de Bruselas y la que más se juega en los comicios, ya que aspira a un segundo mandato.