La viceprimera ministra de Ucrania, Olha Stefanishyna, durante la primera conferencia de adhesión celebrada este martes en Luxemburgo

La viceprimera ministra de Ucrania, Olha Stefanishyna, durante la primera conferencia de adhesión celebrada este martes en Luxemburgo Unión Europea

Europa

La UE y Ucrania discrepan sobre la adhesión: Kiev habla de 2030 y Bruselas ve un "largo proceso"

El Gobierno de Volodímir Zelenski inicia las negociaciones con Bruselas para ser miembro del club comunitario con la amenaza de nuevos vetos de Hungría.

26 junio, 2024 02:43
Bruselas

Frente al entusiasmo desbordante de la delegación de Kiev, los representantes europeos se esforzaban por enfriar los ánimos y mostrar las enormes dificultades en el camino. Ucrania, un país que se encuentra en un momento crítico de la guerra a gran escala desencadenada por Rusia en febrero de 2022, ha iniciado formalmente este martes las negociaciones para entrar en la Unión Europea con la celebración de una primera Conferencia de Adhesión en Luxemburgo.

La viceprimera ministra ucraniana y responsable de integración europea, Olha Stefanishyna, asegura que su país será capaz de completar el proceso antes de 2030. "Ya se ha acordado que Ucrania se convertirá en miembro de la UE y podremos completar todo antes de 2030. Confiamos en que Ucrania pueda lograrlo antes", ha afirmado en Luxemburgo.

En contraste, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, ha avisado de que se trata del "comienzo de un largo proceso". "Si bien hoy celebramos un importante paso adelante, también debemos reconocer que el camino que queda por recorrer requerirá esfuerzo sostenido, dedicación y más reformas sustanciales", ha señalado.

[La UE usa una artimaña legal para sortear el veto de Hungría a la ayuda militar a Ucrania]

Un diálogo que costará años o incluso décadas, si se tiene en cuenta el precedente de los países de los Balcanes. En el caso de Montenegro, el más avanzado, las charlas de adhesión comenzaron el 29 de junio de 2012. Tras 12 años de diálogo, se han abierto los 33 capítulos de los que consta la negociación, pero sólo se han cerrado 3 de forma provisional.

El ejemplo más extremo es el de Turquía, que celebró su primera Conferencia de Adhesión en 2005 y lo más probable es que nunca llegue a entrar en la Unión Europea.

En el caso de Ucrania (y el de Moldavia, que también ha empezado a negociar este martes), todos los plazos se han acelerado debido a la guerra de agresión de Vladímir Putin. "Cuando firmamos la solicitud de ingreso en la UE el quinto día de la guerra a gran escala, muchos dijeron que no era más que un sueño. Pero hicimos realidad este sueño. Lo logramos, persuadimos y disipamos todas las dudas", ha celebrado el presidente Volodímir Zelenski.

Pese a las reservas iniciales, los líderes europeos aprobaron el estatus de candidato para Ucrania en junio de 2022. En diciembre de 2023, los jefes de Estado y de Gobierno adoptaron la decisión política de iniciar negociaciones con Kiev, gracias a que el húngaro Viktor Orbán -que estaba en contra- se salió de la sala. 

La viceprimera ministra de Ucrania, Olha Stefanishyna, y la ministra de Exteriores de Bélgica, Hadja Lahbib, durante la reunión de este martes en Luxemburgo

La viceprimera ministra de Ucrania, Olha Stefanishyna, y la ministra de Exteriores de Bélgica, Hadja Lahbib, durante la reunión de este martes en Luxemburgo Unión Europea

Han tenido que transcurrir otros seis meses para iniciar realmente las negociaciones, pero Hungría mantiene su amenaza de veto. Para empezar, el Gobierno de Orbán ya ha dejado claro que no abrirá ningún capítulo de negociación durante su presidencia del Consejo de la UE, entre julio y diciembre de 2024.

Es decir, otros seis meses en blanco para Ucrania. "Están todavía muy lejos de cumplir los criterios de adhesión", ha dicho este martes János Bóka, ministro de Asuntos Europeos de Hungría. Budapest mantiene además su bloqueo a un paquete de ayuda militar a Ucrania por valor de 6.600 millones de euros, aunque el resto de socios empiezan a buscar artimañanas jurídicas para sortear el veto de Orbán.

"Ucrania y Moldavia saben que su camino será riguroso y exigente. Las negociaciones de adhesión están diseñadas para preparar a los candidatos para las responsabilidades de la membresía. Por eso no hay atajos", ha dicho la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen.

"Este 25 de junio entrará en la historia de la UE. Esto envía además un mensaje a Vladímir Putin, que ha intentado debilitar a Ucrania y confiscar su futuro. Pero los ucranianos han decidido acercarse más a la Unión Europea", ha dicho la ministra de Exteriores de Bélgica, Hadja Lahbib, cuyo país ocupa la presidencia de turno de la UE. Bélgica ha pisado el acelerador para aprobar el marco de negociación con Ucrania y organizar esta primera Conferencia de Adhesión antes de que empiece la presidencia de Hungría.

A Ucrania le espera ahora un largo camino en el que tendrá que seguir ejecutando las reformas exigidas por la UE en materias como el Estado de derecho y los derechos fundamentales, el refuerzo de las instituciones democráticas y la reforma de la administración pública y los criterios económicos.

"Debe prestarse especial atención a la reforma judicial, la lucha contra contra la corrupción así como la protección y el trato no discriminatorio a las personas pertenecientes a las minorías nacionales", ha destacado la ministra belga.