El presidente de Agrupación Nacional y candidato a Primer Ministro de Francia, Jordan Bardella.

El presidente de Agrupación Nacional y candidato a Primer Ministro de Francia, Jordan Bardella. Europa Press

Europa

De origen magrebí y con su abuelo convertido al islam: revelan el origen de Jordan Bardella, elegido de Le Pen

Una investigación de una revista francesa arrojó algunos antecedentes que el líder de la Agrupación Nacional (RN) quiso ocultar hasta ahora.

2 julio, 2024 02:24

Francia amaneció con el retorno, cada vez más claro, de la ultraderecha al poder. Tras las elecciones legislativas del domingo por la noche, el partido Agrupación Nacional (RN), conducido por el joven Jordan Bardella (28), obtuvo la primera mayoría, desplazando a la fuerza centrista de Macron al tercer puesto y doblegando lo que fue su resultado en los comicios anteriores de 2022. Francia amaneció, también, con algunos hechos desconocidos sobre quien probablemente se convierta en el próximo Primer Ministro. 

Bien se sabía la ascendencia italiana de Bardella, quien se crio en Saint-Denis, uno de los municipios más pobres y peligrosos de todo el país, de la mano de su madre, una mujer nacida en Turín y emigrante en Francia. Él lo ha mencionado en numerosas oportunidades, jactándose de esos antecedentes como un elemento central en su discurso político. Dice saber lo que significa en una "tierra de islamismo" y que no quiere bajo ningún precepto que eso se replique en el resto de la nación. "Lo que sucedía allí no era normal", dijo en medio de su campaña. 

Una investigación hecha por la revista Jeune Afrique arrojó, pocas horas después de conocerse los resultados electorales, que la ascendencia migrante de Bardella va más allá de lo que él ha reconocido públicamente. Su abuelo paterno vive actualmente en la ciudad de Marruecos, Casablanca. Los motivos de su huida al país africano fue su cercanía con el islamismo, religión a la que decidió convertirse recientemente. Su bisabuelo, en tanto, fue un inmigrante argelino que residió en la región francesa de Cabilia, durante la década de 1930. Una época en donde miles de oriundos de Argelia llegaban al país para buscar una oportunidad de empleo en las fábricas textiles. 

Las revelaciones no sólo hacen eco por haber permanecido ocultas, sino por la paradoja que despierta que un líder como Bardella, apegado a la ultraderecha y con un discurso bastante hostil hacia los derechos de los inmigrantes, tenga esas raíces familiares. Él lo ha dicho muchas veces. Defiende, al igual que el resto de su colectivo, un 'modelo de asimilación política', que promueve la integración de extranjeros siempre que se cumpla con la uniformidad cultural del país desde donde se emigra. En ese sentido, naciones como Marruecos o Argelia, podrían quedar al margen del listón. 

El partido del actual candidato defiende y promueve ideas que aumentan las restricciones a quienes deseen entrar a territorio francés. Algo contraproducente si se observa en detalle lo que fueron las historias de los ancestros de Bardella. Dicho razonamiento se simboliza en un discurso de Le Pen en medio de la campaña, donde se comprometió a revisar la Constitución para eliminar las ayudas sociales a los inmigrantes y limitarles su atención médica. "Restringiré drásticamente la inmigración, especialmente el reagrupamiento familiar y pondré fin al efecto 'llamada', reservando las ayudas sociales sólo para los franceses. Restableceré los controles fronterizos, expulsaré a los inmigrantes clandestinos y suprimiré el derecho de suelo". Es este último el que le permite a alguien adquirir la nacionalidad si nació en Francia aún siendo sus padres extranjeros.

Todo esto ocurre en medio de un ambiente electoral que copa todas las portadas de los periódicos y resuena en cada conversación de cafetería. Poco después del remezón que sufrió el centro político, representado en Macron, en las elecciones europeas, fue el mismo presidente quien salió a anunciar el adelanto de las elecciones legislativas. Elecciones que contaron con una participación más que elevada, convirtiéndose en la más alta desde los años 80, oscilando entre el 65,8% y el 69%. El triunfo del ala radical liderado por Bardella y Le Pen vaticinan a una Francia y a una Europa gobernada por la derecha más extrema. Al menos así lo está pidiendo la gente. 

Sobre las investigaciones destapadas por el medio Jeune Afrique, el posible futuro premier francés no se ha pronunciado, acrecentando las dudas sobre él y su pasado. La información parece ser sólida y la controversia no tiene cara de acabar pronto. Su abuelo, nacido en Italia, está cada vez más cerca de la cultura árabe, en parte, por la influencia que recibió de su padre, el bisabuelo del candidato ultra. En su caso, todo arrancó cuando se enamoró de Hakima, su actual pareja y segunda esposa, y decidió irse de Francia y elegir a Marruecos como siguiente destino. Hoy se mantiene allí, junto a ella, trabajando como carpintero-ebanista para expatriados.