Michel Barnier tras la moción de censura de este miércoles en la Asamblea Nacional de París.

Michel Barnier tras la moción de censura de este miércoles en la Asamblea Nacional de París. Reuters

Europa

Michel Barnier presenta su dimisión ante Macron como primer ministro de Francia tras perder la moción de censura

V. Riancho
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Michel Barnier ha presentado su dimisión esta mañana como primer ministro en el Palacio del Elíseo ante el presidente francés, Emmanuel Macron. Lo ha hecho menos de 24 horas después de la moción de censura presentada por la izquierda y apoyada por la extrema derecha por su desacuerdo con los Presupuestos de la Seguridad Social presentados por el Gobierno.

Francia se queda ahora sin Ejecutivo en un panorama lleno de incertidumbre e inestabilidad. Macron, que ahora debe nombrar a un nuevo primer ministro, se dirigirá a la ciudadanía este jueves a las ocho de la tarde en un discurso televisado.

El presidente inició las consultas con los diferentes grupos políticos para el nombramiento de un nuevo jefe de Gobierno incluso antes de la moción de censura y se prevé que este jueves continúe con las conversaciones. Los socialistas franceses, por ejemplo, quieren que Macron busque compromisos "texto por texto". La Francia Insumisa de Jean-Luc Mélenchon, en cambio, quiere que el presidente dimita.

Esa línea sigue la presidenta del grupo de extrema izquierda en la Asamblea Nacional, Mathilde Panot, ha puesto el acento en que la moción de censura con la que cayó Barnier constituye "un fracaso apabullante" para Macron. "El responsable del caos que vivimos ahora se llama Macron", ha dicho en una entrevista al canal LCI Panot, que ha reclamado una vez más que dimita y ha hecho notar que "no somos los únicos", puesto que también lo han hecho algunas personalidades de derechas como Jean-François Copé o Charles de Courson.

La jefa de los diputados del partido mélenchonista ha advertido de que si el presidente nombra a otra personalidad de la derecha o del centro derecha, volverán a organizar una moción de censura en cuanto sea posible.

El nombramiento de un nuevo primer ministro por parte de Macron, pues, no solucionará la situación de inestabilidad política que vive Francia. Las elecciones legislativas del pasado mes de julio arrojaron unos resultados que han sumergido al país en el bloqueo político con una Asamblea Nacional dividida en tres bloques principales, el Frente Popular, compuesto por los partidos de izquierdas; el centro, formado por formaciones liberales o conservadores moderados, y el de extrema derecha del Reagrupamiento Nacional de Le Pen, el partido con más diputados (124).