Israel retira todas las medidas de seguridad de la Explanada de las Mezquitas

Israel ha retirado durante la madrugada de este jueves todas las medidas de seguridad instaladas recientemente en las inmediaciones de las Explanada de las Mezquitas, las cuales han sido objeto de violencia y protesta durante las últimas dos semanas.

Su instalación se produjo como respuesta al asesinato de dos policías a manos de tres árabe-israelíes que salieron armados del complejo de Al Aqsa hace quince días. Los palestinos apostados en las cercanías han celebrado su retirada con muestras de alegría, ha informado la radio israelí Kan.

Las medidas de seguridad consistían en vallas de metal y estructuras para cámaras de videovigilancia, así como los detectores de metal que ya fueron retirados este miércoles. Su desmantelamiento ha formado parte de la lista de exigencias que las autoridades musulmanas que administran el recinto dieron a la policía israelí ayer, según The Times of Israel.

Estas medidas eran consideradas por los musulmanes como una vulneración del statu quo de su tercer lugar más sagrado (tras la Meca y Medina). Por eso, se produjeron protestas y enfrentamientos en Jerusalén Oriental y Cisjordania en las que murieron cuatro adolescentes palestinos. Además, un palestino acuchilló hasta la muerte a tres miembros de una familia de colonos en territorio cisjordano.

Apaciguando la tensión

El presidente de Palestina, Mahmud Abás, ha pedido este jueves que cesen las protestas de los últimos once días, tras la retirada por Israel de las polémicas medidas de seguridad.

Abás ha isntado a los fieles musulmanes a rezar dentro del recinto sagrado, tras negarse a hacerlo durante días y orar masivamente en las afueras para exigir la retirada de los detectores de metales, cámaras y barreras metálicas instaladas.

Por su parte, el gran muftí de Jerusalén (los mutfís son quienes asesoran jurídica y legislativamente en donde el sistema político se basa en los fundamentos del islam), Mohamed Ahmed Husein, también ha señalado que volverán a rezar dentro de Al Aqsa sólo después de que la entidad custodia jordana del lugar, el Waqf, haya confirmado la completa retirada de las medidas de seguridad israelíes.

El disputado recinto, llamado por los musulmanes Haram esh-Sharif y por los judíos Monte del Templo, es el lugar más sagrado para el judaísmo, si bien los judíos no pueden rezar dentro de él, pero sí en el Muro de las Lamentaciones que se encuentra a sus pies.