Marwan Barghouti, el 'Mandela' palestino preso en Israel que podría sustituir a Hamás en Gaza
Vuelven a alzarse las voces que piden la liberación del popular líder de Fatah, encarcelado en Israel desde 2002, en un intercambio de prisioneros.
17 enero, 2024 02:35No es la primera vez que emerge el nombre de Marwan Barghouti como posible líder de la causa palestina en el contexto del conflicto con Israel. Tanto observadores internacionales como sectores del pacifismo israelí lo consideran una figura capaz de unificar el liderazgo palestino frente al octogenario Mahmoud Abbas, denostado presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), y el único capaz de vencer en unas elecciones a Ismail Haniya, líder político de la organización islamista Hamás.
Por esta razón, han sido numerosas las campañas pidiendo su excarcelación, ya que cumple condena por delitos de terrorismo en una cárcel israelí. Ahora, su nombre vuelve a sonar como posible preso a liberar a cambio de los rehenes israelíes que siguen cautivos en Gaza.
Apodado el Nelson Mandela palestino, Barghouti nació hace 64 años en una aldea cercana a Ramala, por entonces bajo jurisdicción jordana. Desde muy joven militó en Fatah, el partido de Yasser Arafat. Llegó a ser un líder destacado y tuvo un papel activo a finales de los 80 durante la primera intifada, lo que le costó la cárcel y la deportación a Jordania.
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Pudo volver en 1994, tras los Acuerdos de Oslo, y fue un gran defensor del proceso de paz, encabezando delegaciones palestinas que negociaron con miembros del parlamento israelí durante aquellos años. Sin embargo, terminó recelando del grado de compromiso de los israelíes.
Cuando estalló la segunda intifada en el año 2000, condenó los ataques terroristas a civiles dentro del territorio israelí, pero defendió la lucha armada frente a la ocupación en Cisjordania y Gaza. Tras sobrevivir a un intento de asesinato en 2001, fue arrestado en Ramala por el ejército israelí en 2002. En 2004 fue condenado por un tribunal israelí a cadena perpetua por colaboración en cinco asesinatos y un intento de asesinato, aunque negó las acusaciones de haber sido el instigador de esos atentados.
También fue condenado por pertenencia a una organización terrorista, las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa, el brazo armado de Fatah, fundado en 1995 para contrarrestar a las milicias de Hamás, al que se atribuyen numerosos atentados.
Intercambio de prisioneros
Para el sector pacifista israelí, Barghouti sería la mejor opción por ser un perfil capaz de unificar a los palestinos, dialogar con Israel y, sobre todo, superar la popularidad de Hamás, que lleva consolidándose dos décadas. Una de las voces con más peso entre los israelíes que ha pedido su excarcelación es Ami Ayalon, veterano militar de la Armada y exdirector del Shin Bet, el servicio de seguridad interna israelí.
El pasado 10 de enero, en su primera entrevista tras el inicio de la guerra en Gaza, declaraba que Barghouti "es el único líder palestino que puede ser elegido, dirigir y unificar a su pueblo de cara a una separación de Israel mutuamente acordada". Apoya la liberación de Barghouti como parte de un intercambio de prisioneros palestinos por los rehenes israelíes que siguen en Gaza.
En su conversación con el diario israelí Haaretz, afirmó que el retorno de los rehenes es lo más cercano a una "foto de victoria" que se puede esperar del conflicto, que deja más de 20.000 muertos en la Franja y millones de desplazados.
Ya se barajó la idea de liberar a Barghouti en 2011 a cambio de Gilad Shalit, el soldado israelí secuestrado por Hamás en Gaza. Sin embargo, la situación actual, podría favorecerle esta vez.
Hay más de un centenar de rehenes israelíes en manos de Hamás cuyas familias están presionando continuamente al gobierno de Benjamín Netanyahu para su liberación y vuelta a casa.
En este sentido, la presión internacional puede ser clave a la hora de liberar a Barghouti para fortalecer a la Autoridad Nacional Palestina de cara al postconflicto, porque tanto Netanyahu como Abbas se resistirán. El primero, porque ha concentrado todos sus esfuerzos en dividir la causa palestina para debilitar a la ANP; y el segundo, porque perdería el poco poder que le queda en favor del preso que tiene el apoyo popular.
El candidato con más apoyo
La última encuesta del Centro Palestino para la Investigación de Políticas y Estudios publicada en diciembre de 2023 deja unos datos interesantes para valorar cómo ha afectado la guerra en Gaza a las preferencias políticas de los palestinos. El apoyo al actual presidente Abbas y a la confianza en la ANP decaen: el 92% de los palestinos en Cisjordania y el 81% en Gaza piden la dimisión de Abbas; mientras que un 68% dice que la ANP es un lastre para los palestinos. El desgaste tanto de Abbas, sucesor de Arafat desde 2004, como de la ANP se viene notando desde hace años. La ANP y su presidente se perciben como corruptos y colaboradores con Israel.
El hecho de que Barghouti lleve más de dos décadas entre rejas le exime de toda acusación de corrupción, que no ha podido salpicarle en la cárcel. Aunque miembro de Fatah, es una figura independiente que durante este tiempo ha mantenido su popularidad, especialmente entre los jóvenes.
Aún entre rejas, se presentó contra Abbas a las elecciones presidenciales palestinas de mayo del 2021, que finalmente fueron suspendidas. La citada encuesta preguntó por el voto en unas hipotéticas elecciones. Si solo se presentaran Abbas y Haniya (Hamás), ganaría este último con el 78% del voto, pero sólo un 53% de participación. Si se añadiera como candidato a Barghouti, la participación subiría al 71%, Barghouti ganaría con el 47%, frente a Haniya con el 43% y Abbas con el 7%.
Barghouti sería la última esperanza para lograr un liderazgo político firme en la ANP y vencer a Hamás. Está por ver si quienes negocian el escenario del postconflicto quieren presionar a Israel para jugársela a esa carta.