En España nos encanta la carne. Según las cifras, en 2021, el volumen de carne fresca consumida en España fue de alrededor de 32 kilos por persona al año. En consecuencia, son muchos los amantes de filetes, entrecots, chuletones... Sin embargo, sabemos que, por ejemplo, preparar un buen chuletón no es tarea fácil.
Para encontrar un chuletón bien hecho acudiremos, por tanto, a los establecimientos expertos en la materia. Concretamente, existe un restaurante en España en el que se puede decir que se come el mejor chuletón de todos.
Bodega El Capricho
El restaurante Bodega El Capricho está situado en el pueblo de Jiménez de Jamuz, en la provincia de León. Y su historia se vincula con la tradición ganadera, y así lo cuentan ellos mismos en su página web (www.bodegaelcapricho.com):
"Todo empezó en un viaje a la Galicia profunda, donde los ancianos aún miran tras los cantos de las ventanas, celosos de que alguien o algo venga a arrebatarles su esfuerzo. Aquel día, en el Valle del Culleredo, una densidad especial habitaba en el aire, una nobleza incondicional unía al hombre y al buey". "Así recuerda José Gordón el día que compró su primer buey."
"El niño que llevaba y traía jarras de vino entre las mesas del viejo merendero familiar que en sus comienzos fue El Capricho, el joven que más tarde empezaría a experimentar con las parrillas descubrió aquel día una pasión casi obsesiva por la búsqueda del buey correcto, por su crianza en el campo, por la maduración exacta de la carne, por el asado perfecto. Sobre esa pasión se ha ido levantando la historia de El Capricho, un proyecto en constante evolución."
Este lugar se considera un templo para aquellos que sean amantes de la carne. De hecho, la Bodega El Capricho y el trabajo de José Gordón (y su equipo) recibió el quinto premio en la lista de los World Best Steak Restaurants. Concretamente, el premio lo recibe la carne de buey que ofrecen con crianza propia y certificada con la marca CaBu.
Este lugar es llamativo debido a que está ubicado en una bodega del siglo XIX excavada en la tierra. En consecuencia, en este lugar se mezcla la pasión por la carne y el gusto por el vinos. De esta forma, José Gordón guarda más de 1.000 referencias de vinos de todo el mundo para servir en su restaurante.
Así lo explican en la página web: "El Capricho comenzó siendo una bodega y el vino nos lleva hoy de vuelta a nuestros orígenes, a nuestras raíces. Nos sentimos en el deber de revivir la pasión que por él sentían nuestros antepasados. Desde hace años estamos recuperando los mismos viñedos que nuestros abuelos y bisabuelos cultivaron en su tiempo, viejas viñas “en vaso” de prieto picudo, mencía, garnacha y algo de palomino que trabajamos a mano, tal como ellos lo hacían".