Internet y el porno, una relación amor-odio que nunca terminará

Cada cierto tiempo la polémica vuelve a surgir. Internet y el porno, una mezcla entre lucha y amor. Internet no es más que el contenido disponible para todo el mundo, y cuando el contenido no se controla y todo el mundo son también menores de edad nos encontramos con que estos pueden llegar sin ningún tipo de problema al porno, algo muy delicado para padres de todo el mundo. Evidentemente en este artículo vamos a hablar sobre temas algo delicados, por lo que si eres menor consulta con tus padres a ver si les parece correcto que sigas.

En esta ocasión ha surgido con la aplicación Vine, que desde que salió el pasado jueves permite a los usuarios compartir pequeños vídeos con un estilo a GIF animado muy interesante y prometía convertirse en la nueva revolución de las redes sociales, especialmente en Twitter ya que directamente apostó por ellos comprándolo hace unos meses.

Dentro de la aplicación podemos encontrar una sección que nos invita a visitar la categoría “explorar”, la cual encabeza la sección “editor’s picks”, es decir, los vídeos elegidos por los editores, aquellos que están considerados los mejores y más llamativos. Y de hecho parece que ayer se dejaron llevar por esto de más llamativos, ya que subió a lo más alto de la lista un vídeo titulado Dildoplay, en el que un hombre se divertía con un juguete sexual. Cada uno tiene sus gustos, y esto no es ni mucho menos criticable.

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El problema del asunto es que este vídeo apareció el primero de la lista de los mejores vídeos según los editores de la propia aplicación, sin que pasase por ningún filtro. Aquí el problema es de Vine, y por lo tanto de Twitter, ya que les pertenece, por no controlar este contenido. Ya han pedido perdón y añadido un mecanismo que permite marcar como conflictivo el contenido de un vídeo, tras el cual habrá que pasar por un aviso antes de la reproducción automática de este, que fue el origen del problema, ya que el vídeo aparecía en reproducción sin tener que hacer nada. Si finalmente el contenido no es apropiado se eliminará.

Pero la cosa no queda aquí, y es que la polémica de lo ocurrido ha escalado hasta llegar a Apple. Vine lanzó como aplicación sólo para iOS, y todavía no está disponible en ningún otro sistema operativo. Las protestas han llegado hasta los de Cupertino, ya que no sólo el polémico vídeo llegó a la cabeza de la lista de selección de editores de Vine, sino que Vine a su vez estaba en ese momento en la lista de aplicaciones seleccionadas por los editores de la App Store, lo que se convierte en un grave problema en un tema tan delicado.

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Lo que empezó siendo un problema para Vine ha acabado escurriéndose de uno a otro hasta convertirse en problema para Apple. Y esto es sólo el último de los casos de esta situación, no la primera vez que ocurre o un caso aislado. De hecho la última fue hace unas semanas, cuando Apple tuvo que retirar la aplicación oficial de 500px porque esta tenía fotografías con contenido pornográfico. Al fin y al cabo es una red social de fotografía, y cada uno puede expresarse como mejor le parezca, parece mentira que la cosa tenga que llegar hasta Apple y esta retire una aplicación porque dentro de esta hay contenido para adultos, aunque este sea controlado desde dentro.

Y esto me lleva a lo primero que pensé cuando surgió este problema con Vine y lo que quiero expresar en este artículo. Quizás no desde sus comienzos, pero si desde hace mucho que Internet viene ligado a la idea del porno. No es que yo lo quiera ver así ni tenga una mente retorcida, es que el 12% de las páginas web del mundo están dedicadas al porno, el 25% de las búsquedas están dedicadas a dicha materia, el 35% de las descargas tienen que ver con este y la palabra sex es la más buscada del mundo. Y eso por no hablar de los beneficios que genera, ya que en 2006 sólo en Estados Unidos fue de 2.840 millones de dólares.

Internet va ligado al porno, y por poco que pueda gustar o polémico que pueda resultar, es algo intrínseco y sin lo que parece ser que no puede existir. El problema no es el porno en Internet en si, el problema es el control sobre este. Si seguimos eliminando servicios y cerrando herramientas por alojar contenido para adultos cuando no es su principal función, lo único que crearemos es la intención de colarlo por algún lado, de hacer trampas, siendo así más peligroso. Existen otras herramientas a las que recurrir, y la protección de datos mediante cuentas y permisos, unida a la educación, son formas mucho más útiles de que esto sea un problema.

¿Qué opinas de todo esto? ¿Crees que el porno es un problema? ¿O lo es la falta de educación sobre el tema? Cuéntanos tus ideas sobre Internet, el porno y que esto sea un nido de polémicas.