Finlandia abre a los ciudadanos la creación de una nueva ley del copyright
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La noticia no es nueva. Diversas empresas y asociaciones Españolas están intentando hacer una ley que penalice las descargas, y que evite que los usuarios puedan descargar material con derechos de autor, desde Internet. La cosa, incluso, puede ir más allá, ya que incluso se ha visto que se ha llegado a vulnerar la privacidad de algunas personas.
Ahora, vamos a tomar ejemplo de los países vecinos. Países que, concretamente, están muy cerca, y de los cuales tendríamos que aprender. Al menos, en esta ocasión. Hablemos de Finlandia, un país que ha decidido preguntar a sus ciudadanos qué leyes les gustaría introducir. Una de estas propuestas, relativa al copyright, ha conseguido pasar los trámites y se debatirá en el Parlamento.
En cierta manera, los protagonistas son los ciudadanos, ya que han sido ellos los que han redactado la ley de copyright que se ha puesto en marcha. Y lo ha hecho consiguiendo los votos necesarios para tenerla en cuenta. ¿Qué significa esta meta? Muy sencillo. Este proyecto tiene varios puntos a tener en cuenta:
- Reduce las sanciones por infracción de derechos de autor.
- Aumenta el uso justo.
- Prohíbe las claúsulas abusivas en los contratos de grabación.
- Facilita que los usuarios realicen copias de los artículos que ya tienen.
- Despenaliza el uso compartido de archivos.
Si, tenemos que reconocer que se trata de unos puntos muy buenos e interesantes que, en el caso de ponerse en marcha en la ley, significará un paso adelante en materia de protección de derechos de autor. Y es que esta nueva ley no evita que los usuarios no puedan hacer un uso justo de sus propios artículos, al revés, les garantiza la posibilidad de hacer copias legales, además de permitirles compartir sus ficheros, siempre que se haga dentro de lo que está establecido.
Una ley bien hecha
Por eso decimos que lo que ha hecho Finlandia está bien. Ha contado con la opinión de sus ciudadanos, sin necesidad de obligarles a aceptar lo que imponen las empresas o los negocios. En este caso, han sido los usuarios los que han decidido lo que mejor les conviene. Y la votación ha sido justa, y adaptada a los nuevos tiempos. Ahora queda que la nueva ley se debata en el Parlamento, y será entonces cuando los políticos se verán presionados, tanto por las compañías como por los propios ciudadanos.
La verdadera buena noticia es que se defienden los derechos de los internautas, se defienden los materiales con derechos de autor y, en especial, ninguna de las dos partes son dañadas. Sin duda, una ley muy bien hecha.