La pelea entre Samsung y Apple se está alargando hasta un punto que resulta cansino hablar de ello.Eso es porque ninguna de las dos parece llegar a un punto en el que pueda vencer claramente a la otra; incluso es discutible que eso sea positivo para ninguna de las dos, ya que si nos olvidamos de los juicios en los que están metidas, se necesitan la una a la otra para la fabricación de chips para los iPhone y iPads. Tal vez por eso los golpes que se propinan nunca son tan duros como para desequilibrar completamente al contrario. Mas bien son tortas en la cara, muy sonoras pero que dejan de picar después de un rato. La última torta en la cara la ha dado Apple al convencer al juez de que Samsung le debe pagar 290 millones de dólares. Todo forma parte del juicio de patentes según el cual Apple defiende que Samsung copió descaradamente sus dispositivos. Como sabemos, se le dio la razón a la compañía de la manzana, y consiguió la prohibición de algunos dispositivos, todos ellos demasiado obsoletos como para suponer algo mas que una mera molestia para los surcoreanos. Donde realmente podría sufrir severos daños es en la multa que se decidiría a posteriori. En un principio la cifra a pagar llegó a ser tan alta como 1.000 millones de dólares, aunque con el paso de los jueces y de las apelaciones esa cifra fue bajando. Los abogados de Samsung esperaban que se pudiese quedar en unos 52 millones de dólares, pero al final la rebaja no ha sido tanta y se ha quedado en 290 millones de dólares. Durante este tiempo, se han ido sucediendo las acusaciones entre ambas compañías delante de los diversos jueces. Samsung llegó incluso a pedir la reprobación de los abogados de Apple por una apelación supuestamente racista en la que al mismo tiempo ensalzaba los productos fabricados en EEUU. Igualmente Apple en un momento tuvo que asegurar que su iPad Mini no fue lanzado al mercado como respuesta a las tablets de siete pulgadas ideadas por Samsung y otros fabricantes de Android. Es poco probable que esto sea lo último que vayamos a leer sobre la pelea entre ambas compañías y de hecho la cifra finalmente impuesta está sujeta a la apelación de ambas partes. Aunque si lo pensamos, es normal que se peleen, teniendo en cuenta que son los dos mayores fabricantes del mercado móvil. Solo nos queda esperar el próximo capítulo de esta saga. Fuente | San Jose Mercury News