Twitter, junto a demás redes sociales, se ha convertido en una herramienta imprescindible para darnos a conocer, ya sea como personas o ya sea como una entidad o empresa. Cuanta mas repercusión e influencia tengamos en estas, mayor éxito tendremos a la hora de la verdad, pero hay unos cuantos fallos que nos podrían entorpecer a la hora de encontrar ese éxito. Probablemente los seis fallos mas comunes de encontrar son los siguientes:

Empezar un tweet con un @usuario

Cuando queremos mencionar a alguien y que todos nuestros seguidores lo vean, lo mas común es empezar el tweet con su usuario como si se tratara de una respuesta. Esta bien hecho, pero si nos damos cuenta al hacerlo sólo lo podrán ver quienes nos stalkeen cotillen el perfil o quienes nos sigan a nosotros y al usuario que queramos mencionar. Para evitarlo podemos o cambiar el formato del tweet para que no empiece con el usuario, o colocar delante de su usuario que no moleste para evitar esto, como puede ser un punto.

La lacra del follow back

¿A quien no le ha venido algún usuario con eso de “sígueme y te sigo”? Si queremos tener una timeline variada y con contenido interesante de verdad, lo mas seguro es que de esa forma no la vamos a encontrar, así que sigue a alguien sólo si sus tweets te parezcan interesantes. Sí, es bonito eso de seguir a alguien que te sigue, pero no es para nada necesario.

Llegar al límite de palabras y no ser gráfico

La gráfica que tenéis justo arriba es el mejor motivo por el que deberíais evitar llegar al límite de los 140 caracteres: los tweets extremadamente largos tienen un porcentaje de ReTweet muy bajo, mientras que los que mas ReTweets tienen son los que están entre 100 y 120 caracteres, estando lo ideal entre los 70 y los 120 caracteres. Además, si tu tweet tiene una foto insertada habrá mas probabilidades de que tenga ReTweets.

No utilizar #hashtags o utilizar demasiados

Los hashtags son una herramienta que dan muchísima visibilidad a tu contenido. Utilízalas, pero hazlo con cabeza: nada de inundar de hashtags, utilizar hashtags que no tengan absolutamente nada que ver para intentar ganar visibilidad, o mencionar a amigos de los que no conoces su usuario o no tienen Twitter con hashtags. Proponte un límite razonable de hashtags (1 o 2 sería lo ideal) a utilizar y proponte cumplirlo.

Publicar las URL enteras

Sí, tiene todo el sentido del mundo hacerlo, y mas cuando usamos herramientas de compartir como los botones que tenéis en las páginas web. Pero la mejor opción con diferencia es utilizar un acortador de enlaces: nos permiten tener estadísticas de cuanto ha sido presionado el enlace e incluso algunos nos permiten cambiar la URL generada para embellecerla. Probablemente las dos mejores opciones que podéis usar son bit.ly y goo.gl.

Utilizar estadísticas demasiado tarde

Sí, esta muy bien eso de mantenerse pendiente del número de Tweets y seguidores, pero si de verdad quieres mantener un control sobre tu cuenta de Twitter deberías de plantearte utilizar estadísticas mas avanzadas que te permitan conocer mejor a tu audiencia. Ya os comentamos algunas en Omicrono que se sumaban a otras tantas para mantener nuestro marketing bajo control, y que probablemente os ayuden con este fin.

Fuente | Twitter Counter Blog