General Motors ha declarado que todos sus coches serán eléctricos, pero se desconoce cuándo.

General Motors, la compañía a la que le precede el título de ‘asesino de los coches eléctricos’ (título que se le acuño tras presuntamente sabotear el mercado de los coches eléctricos mucho antes incluso de que Tesla fabricase vehículos eléctricos), ahora ha comunicado que todos sus coches serán eléctricos.

«El futuro es totalmente eléctrico», es lo que afirmó Mark Reuss, Director General de Desarrollo de Productos de la compañía en el campus técnico en Warren, Estados Unidos, donde ha protagonizado una charla sobre el futuro de la compañía.

Generals Motors es la propietaria de muchas de las marcas que vemos en el día a día: Cadillac, Chevrolet, Hummer (ya disuelta), Daewoo y otras menos conocidas en el mercado europeo (hasta este mismo agosto también se encontraba Opel y Vauxhall en el grupo).

Más de 20 nuevos coches eléctricos

Lo que no está claro es cuándo se dejarán de fabricar y vender los coches de gasolina y los diésel, pues no lo han especificado. Dependerá de cada región y mercado (probablemente de la legislación vigente de cada mercado, entre otras variables). Lo que sí que han aclarado es que presentarán 2 nuevos vehículos eléctricos en 2019 y otros 20 para 2023.

El departamento de I+G de General Motors se están centrando en los vehículos eléctricos

También dio a conocer SURUS (Silent Utility Rover Universal Superstructure), un nuevo concepto de vehículo alimentado por dos motores eléctricos de celdas de hidrógeno, que sería usado tanto para vehículos profesionales, concretamente de reparto, ambulancias o camiones.

El panorama eléctrico mejora, pero a paso lento

Lo cierto es que teniendo en cuenta que General Motors es un grupo muy grande y que cuenta con una decena de marcas bajo su poder, 20 modelos de coches eléctricos se antojan muy poco para 2023, además de que como decimos no se sabe cuándo dejarán de vender vehículos de combustión, por lo que podría ser en 2030, como Mazda.

Otras compañías como Volvo y Jaguar Land Rover, en cambio, ya han puesto fecha a la transición: para 2019 y 2010, respectivamente, todos sus coches serán eléctricos de algún modo: o híbridos o directamente sin ningún tipo de propulsión mediante combustión.