Una semana con el VW Passat GTE, híbrido enchufable: ¿Estamos preparados para el coche eléctrico?
He pasado una semana con el Volkswagen Passat GTE, un coche híbrido enchufable y os cuento mi experiencia. ¿Estamos preparados para el coche eléctrico?
18 marzo, 2018 21:20Noticias relacionadas
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He pasado una semana con el Volkswagen Passat GTE, un coche híbrido enchufable, y os cuento mi experiencia.
Si eres un asiduo lector de Omicrono seguro que estás al tanto de los últimos vehículos eléctricos de Tesla, y de cómo la compañía de Elon Musk quiere cambiar la industria automovilística. En Estados Unidos es posible adquirir un coche eléctrico relativamente económico y cruzar el país con las estaciones de carga rápida pero ¿y en España?.
En nuestro país no encontramos todavía muchas opciones de coches completamente eléctricos; al menos no que cuenten con una autonomía suficiente para solventar la mayoría de viajes. La alternativa más viable es la del coche híbrido: motor de combustión para los viajes largos, y motor eléctrico para los cortos.
Primer viaje con un híbrido enchufable ¿cómo es la experiencia?
El coche que he estado probando durante una semana combina lo mejor de ambos mundos. El nuevo Passat GTE puede recorrer hasta 50 kilómetros en modo cien por cien eléctrico, algo más que suficiente para el día a día; y si no lo es, tenemos un motor de gasolina TSI de 1.4 litros de 156 caballos.
Una vez recogido el coche, y después de ajustar el asiento de manera electrónica, procedí a enfrentarme a los temibles atascos de la gran ciudad para hacer un viaje de larga distancia que me llevara a casa. La salida del gran atasco la realicé en el modo eléctrico 100%; y de entrada, si no has conducido un coche eléctrico nunca, lo que más sorprende es la ausencia de ruido.
En carretera pasé al modo híbrido, un modo en el que el coche automáticamente selecciona la mejor opción según la conducción; más adelante me di cuenta de que este es el modo que debería ir activado de manera continua. El cambio entre los dos tipos de motores es prácticamente imperceptible.
Para saber cual de los dos está funcionando tenemos que fijarnos en el cuadro de instrumentos digital del coche; si la esfera azul supera el 100%, significa que ya ha entrado en funcionamiento el motor de combustión.
Por cierto, en la otra esfera además de la información de la velocidad y los kilómetros de autonomía que nos quedan, aparece el porcentaje de tiempo en el que el coche ha estado únicamente en modo eléctrico. La verdad es que el cuadro de instrumentos es una delicia y se puede configurar para observar lo que más creamos conveniente.
Después de un largo viaje llegué a casa con ganas de mostrar las bondades del coche eléctrico a amigos y familiares pero había un problema, ¿dónde lo cargo?
Los puntos de carga, el gran inconveniente
En las grandes ciudades hay una cantidad media de puntos de carga; incluso en la mayoría de los centros comerciales o aparcamientos puedes darle unos minutos de batería a tu coche. Pero en un pequeño pueblo de Alicante la cosa cambia y es todavía peor si no cuentas con garaje.
El coche viene equipado con dos cables de carga, el Mennekes-Mennekes y un adaptador de este mismo para conectar al enchufe normal. El punto de carga de este Volkswagen Passat GTE viene perfectamente integrado en la parrilla frontal.
Llegados a este punto había dos opciones, cargar el coche en un punto eléctrico normal en el garaje de unos familiares o acudir al punto de carga más cercano situado en un centro comercial a unos 25 minutos en coche.
Las opciones que tenemos para cargar un coche eléctrico o híbrido
La primera opción suponía algo más de 6 horas de carga con un coche de más de 40.000 euros aparcado en la calle y al que le sale un enchufe de la parte frontal; cuando entra en modo carga el conector se bloquea y no se puede arrancar, pero eso no quita que se te pase el miedo de dejar el coche así en la calle.
Probé esa opción durante unas horas, saliendo de vez en cuando a la calle para comprobar que todo estaba bien, aunque finalmente decidí acudir al centro comercial para realizar la carga completa del motor eléctrico de manera más rápida y segura. En este tipo de cargadores la “carga rápida” tarda entre 2 horas y 2 horas y media por lo que te da tiempo a hacer muchas compras.
Después de realizar la carga completa del motor eléctrico pasé el resto de la semana en el modo híbrido. Y es entonces cuando descubrí una delicia en el día a día, con el modo eléctrico funcionando en la mayor parte del tiempo; es entonces cuando puedes disfrutar de la aceleración continua y de un silencio relajante.
Asistencias a la conducción, el prólogo a la conducción autónoma
No quiero dejar de hablar de la asistencia a la conducción que integra este coche, algo que está relacionado muy de cerca con la tecnología y la integración con los coches eléctricos. Las ayudas a la conducción que integra el Passat GTE se situarían entre el nivel 1 y el 2, la conducción autónoma 100% es el nivel 5.
Una de las más útiles fue Side Assist: el coche detecta el tráfico y nos avisa cuando vamos a cambiar de carril si tenemos un coche cerca; de esta manera se eliminan los puntos muertos y nos dota de mayor seguridad.
En los viajes largos que he realizado han sido de gran ayuda otros modos de asistencia como Lane Assist, que detecta las líneas de la carretera y te ayuda a mantener en coche en el carril. Pero sobretodo, el control de crucero adaptativo (ACC), por el que el coche adaptará la velocidad al vehículo de delante, manteniendo la distancia de seguridad que hayas fijado previamente; al cambiar de carril, automáticamente volverá a la velocidad máxima fijada previamente.
Queda mucho por hacer, pero merecerá la pena
Soy una persona muy concienciada con el medio ambiente y de las que cree que el modelo de negocio de la industria automovilística va a cambiar radicalmente en los próximos años; estos siete días con un coche eléctrico han sido la confirmación: han hecho que quiera tener uno (aunque el que he estado probando no pueda permitírmelo). Prueba de ello es mi cara al dejar el coche en las instalaciones de Volkswagen.
En mi opinión todavía queda mucho por hacer para tener un coche eléctrico. Los garajes comunitarios deberían incluir varios puntos de carga, además de todos los centros comerciales, gasolineras y ciudades; aunque tal vez el mayor de los problemas sea la autonomía. Ahora estamos viendo en los salones de automóvil coches con más de 400 kilómetros de autonomía, esperemos que para cuando salgan a la venta haya más puntos de carga rápida.
Si quieres dar el salto al coche eléctrico o al híbrido enchufable hay aplicaciones o páginas webs en las que puedes consultar puntos de carga, yo estuve usando Electromaps.