Los juegos Battle Royale han estallado en los últimos meses. Ya existían hace varios años, pero no ha sido hasta el año pasado cuando cientos de miles de jugadores se han lanzado a probarlos. Y a quedarse enganchados en ellos, invirtiendo horas y horas en ser los mejores jugadores de cada partida.

Por supuesto, estamos hablando de los juegos en los que se reune a 100 personas en un campo de batalla. El único objetivo es ser los últimos en pie cuando acabe la partida. Y ahora mismo dos juegos son el estandarte de esta tendencia: PlayerUnknown: Battlegrounds y Fortnite: Battle Royale.

Dos juegos con filosofías diferentes

Porque lo cierto es que ambos juegos son muy diferentes. Es cierto que ambos beben del mismo concepto: una batalla de 100 personas en la que todos luchan contra todos. Ambos tienen formas de cerrar el campo de batalla, en ambos tenemos que recoger armas del campo de batalla. Y en ambos la única meta es ser el último en pie.

Ambos juegos siempre se han visto como rivales, el uno del otro. PlayerUnknown llegó e hizo estallar el mercado, y Epic lanzó su alternativa gratuita para captar a parte del público. Es fácil pensar esto cuando los dos juegos tienen mécanicas similares, se manejan más o menos igual e incluso la meta es la misma.

Pero cada juego lo hace a su manera, en realidad. PUGB quiere verlo con un enfoque más realista, asemejándose más a la realidad. Y, mientras, Fortnite no tiene miedo de tener un estilo más frenético y desenfadado. Puede parecer una tontería, pero esta diferencia es muy clara en cuanto juegas ambos títulos.

PUGB y su acercamiento al realismo

El juego de Bluehole fue el primero en llegar, y ha sido el que ha levantado todas las pasiones. Quizás es porque se lo toma en serio, o quizás lo intenta. Los personajes son humanos, los campos donde luchamos son realistas, las armas y los accesorios que nos encontramos son reales… y quizás es esto por lo que gusta a tantos, porque intenta ser real.

Y esto juega tanto a su favor como en su contra. PlayerUnknown: BattleGrounds es un juego que se publicó como una especie de beta, sin terminar el desarrollo. Los fallos que ha arrastrado el juego desde entonces son conocidos por todos. Problemas con los gráficos, fallos que aparecen a lo largo de las versiones… por no hablar de los hackers.

Si dejamos todo eso a un lado, tenemos un juego que desafía mucho para llegar hasta el final. Con un mapa enorme y vehículos a nuestra disposición, tendremos que emplearnos a fondo si queremos sobrevivir mucho tiempo.

Fortnite y su ritmo más frenético

Mientras, Fortnite le da una vuelta de tuerca al concepto. El título de Epic Games no parece tomarse en serio, y tampoco es algo malo. Dentro de esta poca seriedad podemos hablar de un juego muy bien construído y depurado. Muy al contrario de lo que trae a la mesa PUGB.

Además, algo único de Fortnite es la construcción. Podemos recolectar material de cualquier cosa que nos encontremos, al más puro estilo Minecraft, y usarlo para crear nuestras propias edificaciones y protecciones. Algo que no es opcional: necesitamos aprender a construir si queremos llegar a los puestos más altos de las partidas.

Y quizás destaca de Fortnite que no es un juego que se tome en serio. Un autobús que vuela, la estética de dibujos animados que caracteriza el juego, o el mero hecho de construir piezas en el aire para formar tu base. Cosas que no vamos a ver en la vida real, pero que le aportan diversión y frescura al género.

Dos juegos diferentes y entretenidos por igual

Al final, ambos juegos son muy entretenidos de jugar. En ambos debemos pensar de una manera diferente para llegar hasta el final, aunque el objetivo sea el mismo. Y cada juego lo hace de una forma muy distinta respecto a su rival.

Quizás el primer contacto de muchos sea con Fortnite, gracias a que es un juego gratis. De por sí es una ventaja, no tenemos que pagar para unirnos al juego básico. También es el más gamberro de las dos alternativas. Y el más creativo, haciéndonos construir toda clase de estructuras para avanzar en el juego y sobrevivir.

O quizás fue PUGB, por ser el primer gran título que está en la cresta de la ola. Aunque sus desarrolladores desoigan a parte de la comunidad, es un juego entretenido que se puede disfrutar. Es el más realista si se hiciera de verdad un Battle Royale. Y es el más desafiante, en el que más importa lo buenos que somos.