Durante siglos, los habitantes del desierto han tenido que luchar contra sus inclemencias; de día, con el calor abrasador, y por la noche, con el frío invernal. Su genialidad es que han sabido sacar provecho de esto, con métodos para obtener agua del ambiente.

Ahora desarrolladores del MIT y de la Universidad de California en Berkeley han dado una vuelta de tuerca a este método, desarrollando un dispositivo para obtener agua del aire sin las limitaciones que normalmente nos encontramos en esas situaciones.

Así funciona el dispositivo para obtener agua del aire

Normalmente obtener agua del aire es difícil con una humedad inferior al 50%; y otros aparatos que prometen lo mismo precisan de una gran cantidad de energía, justo lo tercero más valioso que tienes si estás en medio del desierto.

El dispositivo del MIT y Berkeley, en cambio, funciona de manera pasiva; es decir, no tenemos que conectarlo a ninguna batería o enchufe. Pero tal vez más importante, funciona con una humedad del 10%, por lo que es posible obtener agua incluso en ambientes más áridos.

La clave está en una estructura con una amplia superficie, creada en un nuevo material “metal-orgánico”, creado a partir de moléculas unidas que forman un material superporoso. Si esta estructura es hidrofílica, es decir, que atrae el agua, es posible obtener agua simplemente con que el aire pase por ella.

El equipo ya ha llegado a demostrado las posibilidades de este material. El dispositivo funciona en dos fases. Por la noche, obtiene el agua de la humedad ambiental; y de día, usa la luz del sol para soltar el agua de la estructura y llevarla a un condensador. Ya está, el usuario no tiene que hacer nada y puede beber la preciada agua, que no contiene impurezas.

En las pruebas, el dispositivo consiguió un cuarto de litro por cada kilogramo de material. El siguiente objetivo de los investigadores es obtener varios litros de agua con el mismo material.