El vídeo filtrado que revela el futuro de Google: tomar decisiones de nuestra vida usando todos nuestros datos
Un vídeo filtrado de Google X revela el que podría ser el futuro de Google: un sistema que toma decisiones por nosotros en base a nuestros datos.
17 mayo, 2018 16:06Noticias relacionadas
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Un vídeo filtrado de uso interno ha revelado un posible futuro de Google, como compañía que va más allá de simples sugerencias.
Para muchos de nosotros, Google ya es una parte intrínseca de nuestras vidas; si nos lo quitan, probablemente podríamos buscar alternativas, pero nos costaría bastante. Ya no está presente sólo en nuestro navegador; también en nuestro móvil, en nuestro coche, y hasta en nuestro reloj.
Google está en todos lados, y no es ningún secreto que usa esa omnipresencia para obtener una enorme cantidad de datos de nuestras vidas; de hecho, muchos bromeamos con que Google sabe más de nuestra vida que nosotros mismos. Pero ¿y si eso dejase de ser una broma, y se convirtiese en algo real?
El vídeo que plantea el futuro de Google
El vídeo The Selfish Ledger, filtrado y publicado por The Verge, pinta ese futuro. Es un corto de nueve minutos creado en 2016 por Nick Foster; que aquel mismo año se convirtió en jefe de diseño de Google X (hoy conocida simplemente como “X”). Este vídeo se compartió de manera interna entre los empleados de Google.
Esta división se dedica a investigar los proyectos más futuristas e imposibles de hacer realidad con la tecnología actual; es el equipo que se encarga de mirar al futuro. Y el futuro de Google, según este vídeo, implica meterse en absolutamente todos los aspectos de nuestras vidas.
En The Selfish Ledger (“El libro mayor egoísta”, una referencia a “El gen egoísta” de Richard Dawkins), Foster alega que los smartphones se están convirtiendo en “libros mayores”, en los que se registra la evolución de quienes somos. No estamos hablando sólo de datos como qué páginas hemos visitado; sino de nuestras acciones, nuestras decisiones, preferencias, movimientos, y relaciones. Y Foster propone usar ese conocimiento para influir en nuestro comportamiento.
En vez de crear dispositivos, o apps, basadas en principios de diseño centrados en el usuario, sería posible usar toda esa información para crear experiencias y herramientas que nos guíen por nuestro camino. Y sí, es tan distópico como suena.
En la actualidad, tomamos una decisión y preguntamos a Google cómo hacerlo. En el futuro presentado en el vídeo, es la propia Google la que toma esa decisión basándose en los archivos que tiene sobre nosotros.
No solo eso, sino que esos archivos podrían “heredarse”. No seríamos los propietarios de esa información, sólo los cuidadores o poseedores temporales; la información podría pasarse a otros usuarios, de la misma manera en la que pasamos nuestros genes a nuestra descendencia. De esta manera, los nuevos usuarios pueden “beneficiarse” de la experiencia y las decisiones de la generación anterior.
Cuando nuestro móvil nos “sugiere” cambios en nuestra vida
Los ejemplos muestran cómo se aplicaría esta información. Por ejemplo, con una app que nos permitiría ponernos un objetivo genérico, como “comer más sano”, o “proteger el entorno”; dependiendo de lo que elijamos, a partir de entonces la app nos guiaría en nuestras decisiones para cumplir ese objetivo. Por ejemplo, indicándonos que deberíamos comprar frutas locales en vez de las importadas.
Para que este sistema funcione, haría falta una inmensa cantidad de datos; y el propio sistema se encargaría de obtener datos que le faltasen, como por ejemplo, sugiriéndonos productos que obtienen datos. En el vídeo, se muestra cómo el sistema recomienda que compremos una báscula porque no sabe nuestro peso; eso hasta que sea capaz de imprimir en 3D sus propias “sugerencias”, claro.
Pese a que este corto introduce ideas chocantes, representantes de X aseguran que ese era el propósito del vídeo. Es lo que llaman “diseño especulativo”, en el que exploran ideas incómodas para provocar discusión y debate. En Google afirman que este vídeo no refleja ningún producto actual o futuro.
Pero es difícil ver ese vídeo, incluso con ese contexto. Sobre todo porque hay algunos aspectos que no difieren mucho de lo que Google ya ofrece; por ejemplo, con Google Assistant, su asistente capaz incluso de pedirnos una cita en el peluquero sin que nadie sepa que no es una persona real.