El primer tobogán acuático que usa Realidad Virtual ya está funcionando

Quién no ha soñado con un parque de atracciones mezclado con Realidad Virtual? La primera atracción (que además es acuático) que mezcla emociones físicas y Realidad Virtual ya está funcionando, y el primer parque de atracciones que al completo basa su experiencia en la Realidad Virtual podría estar acabado pronto.

Este primer tobogán acuático con Realidad Virtual, como decimos, ya está en funcionamiento. Está ubicado en un parque de atracciones de Alemania, concretamente en el Galaxy Water Slide World, que se denomina a sí mismo como el parque acuático más grande de Europa. Y puedes ir a visitarlo y disfrutar de la experiencia mixta entre las sensaciones del tobogán y de la Realidad Virtual.

La experiencia de RV está directamente desarrollada por Ballast, una compañía dedicada al desarrollo de Realidad Virtual. Las gafas de Realidad Virtual en realidad son unos casos de RV con un Samsung Galaxy S8 dentro (no se estropearán con el agua, pueden mojarse e incluso sumergirse). El teléfono está dentro de los casos, y recibe ultrasonidos para identificar en qué punto de la atracción se encuentra, de modo que puede calcular la inercia. Cada persona es diferente (diferente peso, eminentemente), por lo que el viaje no será completamente igual.

El primer tobogán con Realidad Virtual, en Alemania

El usuario recibe el casco de Realidad Virtual al llegar al tobogán y puede elegir entre tres experiencias distintas. Lo cierto es que las experiencias podrían ser algo más realistas. La compañía probablemente haya prestado más atención a que el software funcione antes que a las experiencias visuales (aunque esta otra parte también es tan importante), algo que podría ser un error.

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Para elegir una experiencia u otra, simplemente se pasa las gafas por un panel que, al entrar en contacto con ellas, activa directamente ese mundo virtual. Por el momento estas tres experiencias son un mundo espacial, un mundo nevado y el cielo.

Además, los cascos tienen tecnología inalámbrica que permiten que la batería del teléfono esté siempre cargada, algo esencial. Mientras las gafas no se usan están cargándose continuamente mediante el cargador inalámbrico, por lo que pueden durar todo el día encendidas. Todo está minuciosamente pensado, y sus creadores han usado una RV relativamente barata (gafas propias con Galaxy S8) para hacerlo.

Lo cierto es que, a falta de probarlo físicamente, las sensaciones desde fuera son muy buenas y tiene buena pinta, tanto desde el lado técnico como desde el lado del ocio.