Parece mentira, pero ya han pasado 10 años del lanzamiento de Chrome. Es fácil subestimar la gran influencia que el navegador de Google tuvo, no solo en el mercado de los navegadores, sino en toda Internet tal y como la conocemos.
Fue Chrome el que consiguió vencer de una vez por todas a Internet Explorer, el que hizo ver a todo el mundo, incluida Microsoft, que la Web era demasiado lenta por culpa de sus productos. El impacto de este proyecto aún se nota en toda Internet, como una onda expansiva. Es el navegador más usado e influyente, sin duda.
Pero no es menos cierto que a Chrome ya se le notaban las arrugas. Los cambios en los últimos años han sido mínimos, como una estrella del rock que tiene miedo a experimentar, por si acaso su audiencia se molesta. La interfaz se ha vuelto obsoleta, la cantidad de funciones integradas, insuficiente. Chrome necesitaba renovarse.
Así es el nuevo Chrome, con interfaz renovada
Y, con motivo de su décimo aniversario, eso es justo lo que ha hecho. El nuevo Chrome ya está aquí, con la versión 69 del programa, y es algo más que una simple cirugía estética; estamos ante un navegador que ha perdido peso, eliminando las partes que ya nadie usa o que no tienen hueco. A cambio, vemos muchos cambios que notaremos instantáneamente.
El más aparente es el cambio estético. La nueva interfaz de Chrome dice adiós a las características pestañas de siempre, por unas de aspecto más rectangular pero con bordes redondeados; de esta forma, es más fácil ver los iconos de las webs si tenemos muchas pestañas abiertas al mismo tiempo.
Los colores son ahora más claros y mejor conjugados. Los elementos redondeados dominan la interfaz, desde la barra de direcciones a los botones e iconos. En otras palabras, el diseño de Chrome bebe directamente de Material Design 2; la guía de diseño que Google usa en Android y en sus aplicaciones y webs. Chrome ya no es el patito feo en este sentido.
La mencionada barra de direcciones no solo se ha renovado visualmente. También funcionalmente. De la misma manera que el buscador de Google puede respondernos todo tipo de preguntas, ahora la barra de direcciones mostrará automáticamente respuestas dependiendo de lo que escribamos. Así podemos encontrar lo que buscamos sin necesidad siquiera de pulsar Intro y entrar en Google. La barra también nos llevará directamente a una página si ya la tenemos abierta y aún así la hemos buscado. Útil si tenemos decenas de pestañas abiertas.
Chrome nunca ha sido tan personalizable como otros navegadores. Al menos con la nueva versión podemos hacer cosas como poner un fondo de pantalla en las pestañas en blanco, así como crear atajos a las páginas que más usemos.
Nuevo generador de contraseñas
La seguridad siempre ha sido un punto importante para Google; y es por eso que es normal que tenga un gestor de contraseñas integrado. La novedad en este caso es que Chrome ahora tiene un generador de contraseñas; al crear hileras de caracteres aleatorios, es menos probable que alguien pueda averiguar nuestra contraseña. Así nos ahorramos tener que usar “12345”, o el nombre de nuestro hijo. Y como Chrome guarda automáticamente las contraseñas, no tendremos que recordarlas.
Un gran cambio que ya comentamos es que Chrome ya no marcará las páginas HTTPS como “seguras” a partir de Chrome 70. Eso es porque según Google, todas las webs tendrían que usar HTTPS, así que no tiene sentido distinguirlas; en vez de eso, el navegador sólo nos avisará si la página no usa HTTPS en la próxima versión, Chrome 70.
El nuevo Chrome es bien recibido. El navegador de Google necesitaba este cambio de imagen; aunque por dentro el trabajo nunca ha terminado, ahora tenemos una interfaz a la altura. Y todo eso, tanto en las versiones de escritorio como en iOS y Android, que nuestros compañeros de El Androide Libre han analizado.
Chrome 69 se irá actualizando a todos los usuarios en las próximas horas.