Alexa ya ha conquistado muchos salones. También se está expandiendo a nuestras cocinas y básicamente a cualquier rincón de nuestra casa. Pero aún quedan muchos lugares a los que expandirse.

Por ejemplo, el coche. Con CarPlay y Android Auto, Apple y Google ya hace tiempo que ejecutaron su ataque, pero en ambos casos tienen una desventaja: principalmente están pensados para coches nuevos. ¿Qué pasa si no queremos o podemos cambiar de coche? ¿Nos perdemos en ese caso las ventajas que ofrecen los asistentes?

Amazon Echo para el coche, para cualquier modelo

Por eso el movimiento de hoy de Amazon puede ser tan peligroso para Apple y Google. Se llama Echo Auto, y se trata de un dispositivo que podemos instalar en nuestro coche para conseguir Alexa al momento. Sí, hasta los coches más viejos podrán convertirse en “inteligentes” con este añadido.

El Echo Auto se conecta a nuestro coche por Bluetooth, Bluetooth LE, o la conexión jack de nuestro reproductor; incluye un accesorio para montarlo en el salpicadero del coche, y que así siempre esté a la vista. Aunque en realidad, lo vamos a mirar poco, ya que sólo la barra de luz es un indicativo de que está funcionando.

Como todos los Echo, este se controla con la voz; podemos dar las mismas órdenes de voz que en casa, aunque por supuesto habrá nuevos comandos adaptados al coche. Pero por lo demás, es la misma experiencia; eso es gracias a que en realidad el Echo Auto se conecta a nuestro smartphone para conseguir conexión a Internet. Además, podemos usar el smartphone como pantalla del dispositivo, para ver información o mapas, por ejemplo.

El Echo Auto ejecuta un sistema operativo en tiempo real, dada la prioridad de contar con un sistema ligero y rápido en el coche. Es gracias a eso que Amazon ha podido solucionar algunos de los problemas de este tipo de sistemas, como el ruido de la carretera o del aire acondicionado.

El Amazon Echo Auto estará disponible por 49,99 dólares, aunque en EEUU algunos usuarios de prueba lo podrán conseguir por la mitad a finales de año.