Tesla demostró que los coches eléctricos no tienen porqué ser lentos y aburridos con el Model S; para mucha gente fue toda una revelación, cuando un turismo de cinco puertas con baterías empezó a machacar a algunos de los mejores deportivos del mercado. Es cierto que en velocidad punta no les podía alcanzar, pero gracias al par motor instantáneo de las baterías, el Model S es capaz de acelerar a una velocidad vertiginosa. Tesla sabe que puede convencer a los más fanáticos de la gasolina de esta manera, y por eso sigue apostando por modelos de alto rendimiento.

Pero el resto del mundo no se ha quedado quieto, por supuesto. Cada vez hay más fabricantes que apuestan por la electricidad, y alguno ya puede superar a los Tesla en algunos aspectos, como el precio o incluso el rendimiento. Las mayores sorpresas nos las podemos llevar con los coches que menos nos esperaríamos, como ha demostrado un Nissan Leaf Plus en un enfrentamiento contra un Tesla Model S.

Un Nissan Leaf contra un Tesla Model S, una carrera sorprendente

La carrera de 14 vueltas se organizó en el circuito japonés de Sugo, como parte de una reunión anual de entusiastas en la que comprueban cuál es el coche eléctrico más rápido. El Model S llegaba invicto a la prueba, y no parecía que fuese a tener mucha competencia; al fin y al cabo, en el último año tampoco han llegado tantos eléctricos al mercado. Entre los participantes se encontraban desde coches eléctricos de serie, a modelos modificados con motores eléctricos.

Pero fue una novedad de este año la que le provocó los peores dolores de cabeza, el Nissan Leaf e+ (o Leaf Plus) que fue lanzado a principios de año. El Leaf ya lleva unos años en el mercado, y esta renovación trae consigo más potencia y autonomía; el e+ destaca por su motor de 217 caballos, pero sobre todo por su nuevo paquete de baterías de 65 kWh, que ocupa el mismo sitio que el anterior paquete de 40 kWh.

Son buenas cifras, pero insuficientes comparadas con el Model S, ¿verdad? Pues inicialmente eso es lo que parecía, ya que el Model S obtuvo el liderato pronto y parecía completamente en control, manteniendo una distancia prudencial. Cuando parecía que nada iba a cambiar, llegó el giro de guión: en la vuelta 11 el ritmo del Tesla empezó a decaer, hasta que finalmente el Leaf Plus le pasó sin problemas en la recta.

El creador del vídeo da a entender que ha sido un problema “de gestión”; en otras palabras, el piloto del Tesla no supo gestionar la temperatura de las baterías durante la carrera, y perdió rendimiento al final por ello. El menor peso del Leaf seguramente habrá tenido buena parte de culpa en esta victoria.