Todos los años Apple siempre presume del soporte que ofrece a sus dispositivos, y cómo sus usuarios siempre tienen la última versión del sistema operativo. No es para menos, teniendo en cuenta los extremos a los que llega para asegurarse de que la mayoría de sus aparatos están al día.
Sí, incluso si tienes un dispositivo tan viejo como el iPhone 4S, lanzado en 2011 y abandonado oficialmente en septiembre de 2016, aún puedes seguir recibiendo actualizaciones; de hecho, es lo recomendable si no quieres perder una de sus funciones más importantes.
El lanzamiento de iOS 9.3.6 es sorprendente pero necesario. Se trata de una actualización que recibirán el iPhone 4S, el iPad Mini original, y la segunda generación del iPad; todos ellos dispositivos obsoletos pero que aún son usados a diario y muy atractivos en el mercado de segunda mano. Además, también se ha lanzado iOS 10.3.4, para el iPhone 5 y el iPad de cuarta generación.
Nueva actualización para el iPhone 4S
El motivo de esta repentina actualización es que el próximo 3 de noviembre de 2019 el GPS de algunos modelos de iPhone y de iPad podría dejar de funcionar de manera precisa. Los datos obtenidos podrían no coincidir con la realidad, lo que provocaría que muchas funciones y apps fallasen.
Este error se produce debido al llamado "efecto 2000" de los GPS, debido a la manera en la que los dispositivos almacenan la fecha, que sólo es capaz de contar el tiempo de manera precisa durante 1023 semanas, o unos 20 años. Un dispositivo sin actualizar entonces puede creer que ha vuelto al pasado y el cálculo de la posición fallará.
Esta actualización evitará que pase eso con los dispositivos de Apple lanzados en 2012 y antes. Para conseguirla, sólo tienes que hacer lo mismo que con cualquier otra actualización: entrar en Ajustes, General y Actualización de software.
Los iPhone no pierden tanto valor
Aunque se trate de una actualización que no trae novedades importantes para el usuario, sí que nos permitirá seguir usando nuestros dispositivos sin problemas y sin perder ninguna de las funcionalidades que tenía cuando lo compramos. Ese es el as en la manga de Apple, y la razón por la que sus dispositivos no se devalúan tanto.
Es bien sabido que los iPhone vendidos de segunda mano pueden costar mucho más que un móvil Android nuevo y recién salido, y es por cosas como esta. Google aún no es capaz de decir que un móvil que fue lanzado hace siete años, y que oficialmente no está soportado, sigue recibiendo actualizaciones.