Siempre queda la duda de qué ocurre cuando le hablamos a un asistente virtual. ¿Qué hace, por ejemplo, Apple con las grabaciones de Siri que realizamos con nuestros iPhone, Apple Watch, etcétera?
Hace ya unas semanas Google estuvo envuelta en un escándalo que involucraba a empleados y escuchas de las grabaciones de Google Home. Ahora le toca a Apple, empresa que se caracteriza por preocuparse por la privacidad del usuario.
Según The Guardian y tal y como recoge Engadget, contratistas de Apple escuchan información sensible que incluso involucran información sensible como "encuentros sexuales".
Contratistas de Apple escuchan grabaciones de Siri y acceden a su información sensible
Según una fuente del The Guardian los contratistas de control de calidad de Siri escuchan con cierta regularidad información confidencial. Esta información contiene, por ejemplo, datos confidenciales, íntimos (de índole sexual) e incluso actividades delictivas.
Esta información revela que dichos empleados escuchan menos de un 1 por ciento de las actividades diarias de Siri y usualmente escuchan únicamente unos pocos segundos de cada grabación. Eso no quita que los datos que se recogen en algunos de estos segundos sean de importante calado; información de solicitudes, contactos, ubicaciones, información acerca de apps...
Este es el mismo patrón que sucedió cuando se supieron los "casos" de Google y Amazon, ya que el objetivo es evaluar qué tan eficaz es Siri como asistente cumpliendo tareas. Apple desea saber qué es lo que ocurre tras cada comando que se realiza en Siri.
En un comunicado, Apple dejó claro que tienen diversas protecciones de privacidad. Según Apple, estas grabaciones de Siri no están vinculadas a las ID de Apple, y son estudiadas en "instalaciones seguras" por personas que están sujetas a "estrictos requisitos de confidencialidad". No se sabe quién fue la persona que realizó la grabación ni existe posibilidad de hacer conexiones entre las grabaciones y sus autores.
Aún así existen preocupaciones
Aunque Apple tenga razón y realmente la cantidad de información a la que acceden dichos contratistas es pequeña, el problema reside en los contratistas. Apple dice que la rotación para los contratistas es "alta" y para las nuevas contrataciones no hay una investigación exhaustiva. Por lo tanto, se podría abusar de esos datos si se eligieran a las personas específicas.
Además no hay un control específico de cuánta información damos a las empresas usando estos asistentes virtuales. Las palabras de activación para estos asistentes no son especialmente infalibles y podríamos estar dando más información de la que nos gustaría. De hecho, en el caso de Google, se supo que las grabaciones supuestamente se realizaban incluso cuando el Google Home tenía el micrófono desactivado.
A esto se le suma el hecho de que Apple, Google y Amazon no informan de forma clara sobre estos equipos humanos de control de calidad. Podemos apagar estos asistentes virtuales, desactivar Siri, Google Assistant y demás. Pero incluso así no podemos controlar la cantidad de información que compartimos.
Por supuesto debemos ser cautos; esto no quiere decir que ahora cada vez que Siri nos escuche un contratista de Apple esté al acecho. Todo este asunto puede apuntar a algo más simple; que Apple debe manejar la forma en la que gestiona estas grabaciones de Siri.