"Rival de Tesla". Será mejor que te acostumbres a leer esas palabras, porque en los próximos años no van a faltar pretendientes que aspiren a ser dignos de ellas. Tal vez uno de los más interesantes es Polestar; una marca que tal vez no te suene, pero si digo que su casa madre era Volvo, seguro que empiezas a unir puntos.

En efecto, antes Polestar era la marca deportiva de Volvo, pero con la llegada de los coches eléctricos se ha convertido en algo más; sus primeros modelos, como el híbrido Polestar 1 o el 100% eléctrico Polestar 2 tienen un estilo nórdico propio.

Con el Polestar Precept presentado hoy, la marca busca algo diferente. A simple vista, parece un sedán eléctrico futurista como cualquier otro, con un diseño repleto de detalles aerodinámicos. Sin embargo, el objetivo con este coche no era ofrecer simplemente otro rival para el Model 3.

El rival de Tesla del futuro

El Precept representa el futuro de Polestar, y por extensión Volvo, en los coches eléctricos. Es por eso que la marca no ha compartido datos sobre rendimiento ni capacidad de las baterías, simplemente porque es poco probable que lo que diga ahora termine pareciéndose a lo que llegue al mercado.

En vez de eso, el Precept sirve para presentar las nuevas tecnologías que Polestar usará en sus próximos coches. Por ejemplo, fíjate en el bulto del techo: eso es un sistema LiDAR, que incluye radar para analizar el entorno y ofrecer niveles avanzados de autonomía completa. También ha sustituido los espejos retrovisores por cámaras, que salen de los lados del coche.

Las increíbles formas y detalles tienen su cometido. Por ejemplo, en el frontal esa especie de "alerón delantero" en realidad aloja una pantalla que servirá para comunicarse con los peatones, algo especialmente útil cuando el coche esté en modo autónomo.

Un detalle que pasa desapercibido al principio es la distancia entre ejes; en efecto, si nos fijamos, veremos que el morro del coche es muy corto pero la distancia entre las ruedas delanteras y traseras es muy grande. Eso se ha hecho para ganar espacio para las baterías, y por supuesto, para conseguir una mayor comodidad para los ocupantes; un espacio interior que está completamente cubierto por el techo de cristal.

Con materiales reciclados y Android

Además del cristal, el otro material predominante en el Polestar Precept es el plástico, pero no para ahorrar costes, sino para enviar un mensaje de sostenibilidad. Los asientos, por ejemplo, tienen una superficie impresa en 3D creada a partir de botellas de plástico recicladas. Las alfombras han sido creadas con redes de pesca rotas que han podido ser recuperadas del mar. Incluso hay partes del coche fabricadas con corcho reciclado. Todo el coche es una demostración de lo que es posible con materiales reciclados.

Este coche será inteligente gracias a estar basado en Android; y con eso, no quiero decir que usará Android Auto como muchos otros modelos actuales. Polestar ya ha dado el siguiente salto, adoptando Android Automotive, una versión completa de Android diseñada para coches.

Por lo tanto, no es que el sistema multimedia (una gran pantalla de 15 pulgadas, por cierto) pueda usar una capa de Android con nuestras apps. Es que los sistemas del coche han sido programado usando Android como base; es una adopción mucho más amplia del sistema de Google de lo que estamos acostumbrados.

El Polestar Precept será uno de los protagonistas del próximo Salón de Ginebra, aunque por el momento no hay detalles sobre su posible lanzamiento.