China, en un movimiento sorpresa que ha pillado a todos desprevenidos, ha anunciado una propuesta a la ONU para cambiar por completo la forma en la que conocemos Internet. Una propuesta que busca habilitar nuevas tecnologías de vanguardia y, en definitiva, cambiar el funcionamiento de nuestro Internet.
Concretamente habríann sido Huawei y las empresas estatales China Unicom y China Telecom junto al Ministerio de Industria y Tecnología de la Información chinas las que, de forma conjunta, han propuesto en la Unión Internacional de Telecomunicaciones de la ONU este nuevo tipo de Internet, llamado "New IP", según indical el diario Finacial Times.
Una propuesta que aunque pueda sonar interesante, ha despertado el temor de algunos expertos ya que conlleva algunas acciones aparentemente autoritarias. Teniendo a mano el historial de comportamientos de China sobre la privacidad en Internet, no es raro que los expertos se preocupen.
El nuevo Internet que propone China
¿En qué se diferencia "New IP" del Internet que conocemos actualmente? Lo primero que debemos comprender es que la estructura del Internet actual funciona, más o menos, como un sistema postal y fue diseñada hace prácticamente medio siglo.
La idea de Internet es enviar información de forma instantánea a otros lugares del mundo. Por ello, los ingenieros desglosaron los mensajes de información en pequeños paquetes que se pueden enviar a través de los dispositivos que las reciban hasta llegar a su destino. Estos paquetes están marcados por una dirección IP, propia de cada red. Los paquetes se reciben en un orden específico una vez el dispositivo (un PC, por ejemplo) los recibe.
El procedimiento usado se conoce como "Transmission Control Protocol" o TCP, y se complementa con el sistema para identificar dispositivos únicos. Es decir, obtenemos "TCP/IP". "New IP", según Huawei, es un "sistema de direccionamiento IP más dinámico". Sus ingenieros explican cómo Internet se está disgregando cada vez más en redes separadas, como comunicaciones privadas o satelitales.
La idea, por tanto, detrás de "New IP" es implementar un sistema de direcciones más eficiente para tecnologías emergentes. Permitiría que todos los dispositivos dentro de una misma red se comuniquen entre sí sin tener que enviar información a través de Internet.
Esta idea tiene un problema: el control de los gobiernos y operadores. El nuevo protocolo necesitaría, según expertos consultados por el Financial Times, que la red tenga ciertos controles de seguimiento para autentificar y autorizar las nuevas direcciones que se agregasen a una red, como personas o paquetes de información que sí entrasen a través de webs.
Esto daría puerta abierta a los gobiernos y operadores a controlar este protocolo, permitiendo o denegando a nuevas direcciones la entrada a la red, permitiendo una potencial censura por parte de gobiernos de corte autoritario.
Por supuesto Huawei ha querido dejar claro que "New IP" sería segura, gracias a unos "comandos de silencio". Estos comandos permitirían que los puntos centrales de redes cortasen comunicaciones hacia direcciones particulares. Pero nos encontramos de nuevo con el mismo problema; estos comandos estarían controlados por los gestores de las redes, y podrían negar comunicaciones con direcciones IP concretas simplemente por corte ideológico.
China defiende su nuevo Internet
Los documentos a los que ha tenido acceso FT hablan de cómo China y Huawei consideran que la infraestructura de Internet actual es ineficaz, sobre todo de cara a unos años en los que habrán más dispositivos que precisen de un Internet más sólido como dispositivos IoT. Huawei ya asegura que están construyendo parte de esta tecnología con la ayuda de otros países.
Se probarán el año que viene y en noviembre tendrá lugar una nueva conferencia de la UIT en la que se espera que Huawei y sus socios den más información acerca de estew proyecto.
El problema es que esta propuesta no ha acabado de convencer a otros países, como Suecia, Reino Unido y a Estados Unidos. Creen que este sistema atentará contra el sistema global de comunicaciones libre que se ha logrado con el Internet actual, y provocaría que los operadores y gobiernos tuvieran un control innecesario.
Rusia sí ha visto con buenos ojos la propuesta del gigante chino, y previsiblemente otros países en desarrollo que están siendo apoyados por Huawei se unirán al proyecto. Desde luego Huawei estaría empeñada en que el proyecto sea fructífero; "New IP" no tendrá sistemas de control en su arquitectura y el proyecto tendrá acceso libre para ingenieros y especialistas que estén interesados en él.