Ningún momento representa mejor la diferencia entre Windows y Mac, que la hora de elegir un nuevo portátil; si usas el sistema de Apple, realmente sólo tienes dos opciones: el MacBook Air o el MacBook Pro, dependiendo de lo que necesites.
En Windows, es el Viejo Oeste; lleno de peligros, pero también de oportunidades y oro, mucho oro. Si acaso, el único producto que realmente es comparable al MacBook es el Surface Laptop: el 'portátil oficial' de Windows, de la mano de Microsoft.
Pero eso no significa que sea el puntero; de hecho, la marca Surface lleva demasiado tiempo viviendo de las rentas, de diseños anticuados como vimos con el Surface Pro 7+. El Surface Laptop 3 sufría de todo eso, y de componentes de generaciones pasadas. Eso cambia con el lanzamiento del Surface Laptop 4, que por 1.129 euros pretende recuperar el trono.
Surface Laptop 4
Pantalla | 13,5 pulgadas (unidad probada) 15 pulgadas |
Resolución | 2256 x 1504 píxeles (13 pulgadas) 2496 x 1664 píxeles (15 pulgadas) |
Relación de aspecto |
3:2 |
Procesador | Intel Core i5-1135G7 (13 pulgadas) Intel Core i5-1185G7 (13 y 15 pulgadas) AMD Ryzen 4680U Surface Edition (13 pulgadas) AMD Ryzen 4980U Surface Edition (15 pulgadas) |
Memoria RAM | 8 GB, 16 GB o 32 GB LPDDR4x |
Almacenamiento | 256 GB, 512 GB o 1 TB SSD extraíble. |
Batería | 47,5 Wh Hasta 19 horas (Ryzen) Hasta 17 horas (Intel) |
Conectividad | 1x USB-C USB 3.2 1x USB-A USB 3.2 1x auriculares de 3,5 mm 1x Surface Connect |
Conectividad inalámbrica | Wi-Fi 6, Bluetooth 5.0 |
Webcam | Frontal 720p compatible con Windows Hello |
Sonido | Altavoces Omnisonic con Dolby Atmos Dos micrófonos de estudio de campo lejano. |
Acabados | Alcantara o metálico (menos modelo básico) |
Peso | 1265 gramos (13,5 pulgadas) 1542 gramos (15 pulgadas) |
Dimensiones | 308 mm x 223 mm x 14,5 mm (13,5 pulgadas) 339,5 mm x 244 mm x 14,7 mm (15 pulgadas) |
El Surface Laptop 4, como su nombre indica, es el portátil completo de la gama Surface. Aunque es perfectamente posible usar cualquier Surface como un portátil sólo con unir una funda con teclado, este es el único dispositivo de la gama, junto con el Surface Laptop Go, que no puede convertirse en tablet.
En términos prácticos, eso puede eliminar algunas posibilidades; pero a cambio, la experiencia como portátil es mucho más apropiada y la típica que podemos esperar de un portátil Windows.
Sigue siendo una Surface, y eso implica decisiones únicas y una calidad de fabricación que sigue estando un grado por encima del resto. Respecto a la generación anterior, la gran diferencia la tenemos en el hardware; ahora es posible elegir entre un Intel Core de undécima generación, y un AMD Ryzen 4000. Esto último suena extraño, ya que no opta por los nuevos Ryzen 5000 que tan buenos resultados han dado; pero a cambio, son procesadores de "edición especial", preparados por AMD para Microsoft con mejoras de rendimiento y consumo.
La unidad que hemos podido probar cuenta con un Intel Core i5, acompañado de 8 GB de RAM; además, la pantalla es de 13,5 pulgadas, y hay opción de 15 pulgadas. Por lo tanto, esta unidad tiene el precio de entrada de 1.129 euros.
Increíble diseño
Pero, ya de entrada, podemos asegurar que no se nota que sea el modelo más "barato". La gran fortaleza de las Surface ha sido su calidad de fabricación y los materiales usados, y Microsoft no ha tropezado. Este es uno de los portátiles Windows con más estilo y fácilmente reconocibles del mercado; posiblemente, el más bonito dependiendo de tus gustos.
Está al nivel de portátiles mucho más caros, y deja muy mal a sus compañeros de rango de precio. El chasis metálico es agradable al tacto, y todos los componentes encajan perfectamente, sin ruidos ni sensaciones extrañas. Es el tipo de detalle que no es evidente, hasta que coges dos portátiles diferentes.
Las proporciones, junto con el logotipo de Windows en la trasera, dejan en evidencia el ADN de este portátil. Hablo de la pantalla de relación de aspecto 3:2, la más alta del mercado y la ideal si queremos leer o trabajar con documentos y páginas web, ya que así no tenemos que hacer tanto scroll; y si tenemos que hacerlo, el touchpad da una sensación de lujo, rápido y certero como pocos.
Sólo unas pequeñas ranuras de refrigeración rompen las líneas, pero sorprendentemente, son suficientes. Ya sea por la alianza entre Microsoft e Intel y AMD, o por una gestión de la energía más eficiente, el Surface Laptop 4 no se calienta ni en las peores situaciones.
También es muy ligero y, crucialmente, el reparto de pesos es mucho mejor que en una Surface convencional; los componentes no están todos metidos tras la pantalla y en ese sentido, es más como un portátil tradicional.
Para la zona del teclado, seguimos teniendo dos opciones: alcantara o metálico. La unidad de prueba opta por lo primero, y la sensación sigue siendo tan agradable como siempre; por supuesto, es algo que no gustará a todo el mundo. Especialmente porque es la única parte que se merece mi crítica, por culpa de la manera en la que flexa ante la presión. En mi caso, he podido comprobar cómo toda la parte superior del portátil se mueve conforme escribo; es cierto que no soy la persona más delicada golpeando teclas, pero no ha sido una visión agradable. Afortunadamente, siempre tenemos la opción de una cubierta metálica, que debería solucionar ese problema; sin embargo, no está disponible en el modelo más barato.
¿Suficiente potencia?
Y es una pena, porque con este portátil, me han entrado muchas ganas de escribir. La sensación de las teclas es correcta, pero lo que más me ha gustado es el entorno de trabajo que se crea con el correcto teclado, el genial touchpad y la alta pantalla. Esta última no tiene nada de especial sobre el papel, con una resolución apropiada y con frecuencias de refresco típica; es táctil y compatible con el lápiz Surface.
En persona, los colores y el brillo son buenos, aunque si lo vas a usar para ver películas, ten en cuenta que buena parte del espacio estará ocupado por barras negras. También tendrás que soportar bordes en la pantalla, si bien no tan notables como en la Surface Pro.
El rendimiento es sorprendente, aunque tal vez no por las razones habituales: lo es en el sentido de que me esperaba algo mucho peor, con un Core i5 acompañado sólo de 8 GB de memoria RAM.
En efecto, estamos en el 2021 y Microsoft aún vende portátiles con unos patéticos 8 GB de memoria por más de 1.100 euros. No hacía falta que Microsoft copiase a Apple precisamente en esto (el MacBook Air de 8 GB tiene exactamente el mismo precio), pero lo ha hecho.
La buena noticia es que, con un uso comedido, no deberías notarlo. En mis pruebas, he podido trabajar sin muchos problemas, manteniendo varias pestañas en el navegador y varios programas. Hay un límite, por supuesto, y aunque Windows 10 hace todo lo posible para gestionar la memoria, llegará un punto en el que lo alcances; y en ese momento, desearás haber soltado algo más por la memoria adicional.
Las pruebas sintéticas indudablemente se ven afectadas por esto: 4317 puntos en PCMark 10, 2192 puntos en Cinebench R20 multinúcleo, 510 puntos en Cinebench R20 un núcleo, 1375 Geekbench un núcleo, y 5158 puntos Geekbench multinúcleo. Sin embargo, esta es una de esas ocasiones en las que las cifras no cuentan toda la historia. Será interesante ver qué puede poner sobre la mesa la versión con procesador AMD Ryzen.
Lo que es menos comprensible es que Microsoft siga fallando con la elección de puertos. En una tablet, no nos quejaríamos, pero no en un portátil que va a ser usado para teletrabajar. Un único puerto USB-A y un USB-C son insuficientes, se mire como se mire; aún más teniendo en cuenta que este último no es Thunderbolt, incluso en la versión Intel, aunque sí sean USB 3.2 ambos.
El puerto que sí está es el Surface Connect, magnético de carga, propio de todas las Surface. Las ventajas de un puerto magnético están claras, especialmente si tenemos mascotas o niños, pero cada vez estoy menos convencido de que esas ventajas superen a los inconvenientes. Especialmente cuando veo todo el espacio que ocupa, y pienso en que ahí podrían ir dos puertos USB-C más, que este portátil necesita como el comer.
Al menos, no tendrás que usar mucho el puerto magnético; este portátil dura y dura. La batería puede durar entre 19 (AMD) y 17,5 horas (Intel) según Microsoft, y nuestras pruebas encajan con esa predicción, con 11 horas de uso mixto, trabajando y multimedia.
Microsoft ha vuelto
El gran problema del Surface Laptop 4 soy yo. Me da la sensación de que esperaba demasiado de esta generación, y Microsoft no tiene culpa de ello. Bueno, un poco sí. Este no es el portátil Windows 10 perfecto, y eso duele porque podría serlo. Todo lo que hace especial a las Surface está aquí, incluyendo una gran pantalla, el mejor touchpad para Windows, un formato ligero y con una calidad de fabricación sin igual.
Pero también vuelven el gigantesco Surface Connect, los puertos insuficientes, y sólo 8 GB de memoria RAM y el teclado con alcantara en su versión más básica. Y eso, sin meternos en que no es posible montar los nuevos procesadores Ryzen de AMD.
¿Sufre demasiado este portátil por ello? La verdad es que no. El Surface Laptop 4 sigue siendo uno de los mejores portátiles con Windows 10 que puedes comprar, una evolución de un concepto que nadie ha podido igualar; podría ser mejor, pero entonces estaríamos hablando de una revolución.
El Surface Laptop 4 ya está disponible a partir de 1.129 euros en la tienda de Microsoft.