Las bicicletas eléctricas cobran cada vez más fuerza en España, ya que son respetuosas con el medioambiente y permiten moverse cómodamente por la ciudad. Un mercado que cuenta con una variedad de modelos, como una barata que consigue que te olvides de ir en metro u otra impresa en 3D que sólo pesa 14 kilogramos, tiene un diseño elegante y un precio de 4.499 euros.
Platzhirsch es una bicicleta eléctrica de la empresa alemana Urwahn, que destaca por contar con un cuadro interno impreso en 3D y fabricado en "acero orgánico"; además de un motor eléctrico en el buje de la rueda trasera que ayuda al pedaleo. Una bici ligera, pesa sólo 14 kilogramos, con un elegante diseño que no pasa desapercibido y cuya principal característica es su personalización: no hay dos iguales.
En OMICRONO hemos probado durante una semana la bicicleta eléctrica Platzhirsch, que brilla por su diseño simple y elegante, con un bonito color 'rojo óxido' que no pasa desapercibido. Además de ser cómoda de utilizar y de rendir bien, tanto en carretera como en tierra, también luce por ser igual de ligera que una bici sin motor.
No hay dos iguales
La Platzhirsch es una bicicleta eléctrica diferente y única, ya que no se pueden encontrar dos iguales, y tiene su explicación. Se trata de una bici que el usuario puede configurar a su gusto; de hecho, la compañía no tiene stock porque se fabrican en función del pedido y la configuración del cliente.
Por ejemplo, se puede elegir entre una variedad de colores, aunque sólo cinco de ellos no tienen coste extra, y hasta añadir logotipos, nombres o frases. También se puede escoger entre diferentes tipos de rueda, como unas para ciudad, otras para tierra y otras mixtas (en las pruebas usamos éstas últimas, siendo bastante resistentes).
El manillar, que cuenta con un discreto botón para cambiar entre los tres modos de apoyo disponibles, también se puede personalizar, como poner uno de carretera. Por otro lado, el guardabarros y el portaequipaje son opcionales. La compañía ofrece varios elementos que tienen un precio extra, y ya depende del usuario si quiere añadirlos o no, como también puede ser un soporte para colocar una botella de agua.
En la parte frontal hay una luz que se activa nada más apretar el botón del manillar, y en la zona posterior, justo debajo del sillín, se sitúan varias luces LED de color rojo. Una bicicleta que tiene cinco tallas de cuadros, que van desde la XS hasta la XL (el modelo de prueba es una M), y cuyo principal 'pero', en cuanto a diseño se refiere, es que no cuenta de serie con 'pata de cabra', es decir, hay que pagar para tener el soporte para sujetar la bicicleta.
Por lo tanto, se experimentan problemas si se quiere apoyar en una pared cuyo suelo no sea recto, ya que en ese caso la bici tiende a moverse. Entre otros detalles, también tiene un espacio para colocar un soporte para el móvil que, a través de una app, hace de pantalla para ver detalles como el recorrido, la velocidad, el cuenta kilómetros o el estado de la batería.
Otro interesante detalle de esta bicicleta es que dispone de una llave maestra única para evitar robos y un GPS ubicado dentro del manillar, que se carga con cable USB, para tener la bici siempre localizada mediante una aplicación para móviles.
En ese sentido, si se deja la bicicleta en un sitio y alguien la coge, el teléfono móvil envía una notificación alertando del movimiento del vehículo de dos ruedas. Para cargar la bici, el puerto se encuentra en la base justo bajo el sillín y cuenta con una tapa, aunque está totalmente protegido contra el agua y la suciedad.
Tres modos de apoyo
En cuanto a detalles más técnicos, la bicicleta eléctrica cuenta con un cuadro diseñado por impresión 3D, con una amortiguación "estructural" que no está a la vista y que permite absorber las irregularidades de un camino para facilitar una conducción suave. En cuanto al cableado, todo transcurre por el interior de la pieza de acero, lo que da la posibilidad de tener un diseño más vistoso.
En cuanto a la batería, se ubica en la rueda trasera, se carga a través de un puerto discreto a prueba de agua y cuenta con una potencia de 250 Wh, que es capaz de ofrecer una autonomía de 80 kilómetros por la ciudad, ampliables a 140 km gracias a una otra batería externa opcional. Además, el proceso de carga tarda 4 horas. La bici también tiene un motor que ofrece hasta 250 vatios hora. Éstos dos elementos están fabricados en Barcelona.
La bicicleta eléctrica ofrece tres modos de apoyo al pedaleo, que se manejan desde el botón correspondiente ubicado en el manillar, que no cuenta con pantalla, pero sí con luces indicadoras y vibración. El apoyo máximo del motor se destaca con el color rojo y ofrece un 75% de fuerza.
Por su parte, el color naranja es para el medio y la fuerza del motor aquí es del 50%; y con el color verde se obtiene el 25%. La bicicleta eléctrica también se puede utilizar como una bici normal, es decir, sin ayuda del motor. Para ello basta con pulsar en el botón del manillar con la flecha hacia abajo hasta llegar al color blanco, que indica que el motor no ofrece ayuda alguna.
Lo cierto es que el motor rinde bien, ya que con la ayuda máxima se puede subir cualquier cuesta sin problemas. Otra característica que llama la atención de la bicicleta es su cadena de polímero que une su único plato con un único piñón. Se trata de una cadena más gruesa que una metálica y que, según la compañía, ofrece tres veces más resistencia y no se sale. Incluso no ensucia ni precisa de grasa lubricante, ya que los dientes de la cadena encajan perfectamente en los discos.
¿Me la compro?
La Platzhirsch es una bicicleta eléctrica diferente, y no sólo porque esté impresa en 3D. Uno de sus puntos más llamativos es que es realmente ligera para llevar un motor, ya que tan sólo pesa 14 kilogramos. Un peso que se asemeja más a las bicis de carretera o convencionales. Por otro lado, cuenta con un diseño elegante que atrae las miradas de otras personas.
Una bicicleta única, que el usuario puede crear totalmente a su gusto escogiendo una variedad de sus elementos, como el color, el tipo de rueda o de manillar, entre otros. Se trata de una bici bastante cómoda de utilizar, tanto por la ciudad como por caminos de tierra, incluso en sesiones largas. Sin embargo, tiene dos importantes inconvenientes: el primero de ellos es su precio de 4.449 euros, que aumenta si se añaden extras; y, por otro lado, la 'pata de cabra' es opcional, hay que pagar 29 euros por ella.
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