Así es el Pilatus PC-21, el nuevo avión de la Patrulla Águila que se estrena en el desfile del 12 de octubre
La gran novedad del desfile del Día de la Hispanidad es el Pilatus PC-21, el nuevo avión de adiestramiento de la Academia General del Aire.
12 octubre, 2022 02:48La pandemia provocó, entre muchas otras cosas, la supresión del desfile militar del 12 de octubre de 2020, y una edición a medio gas en 2021 con menor asistencia de público de la habitual. Este año, el despliegue previsto será muy superior, ya que el Ministerio de Defensa de España ha confirmado la presencia de más de 4.000 miembros de las distintas ramas del ejército y de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en el Paseo de la Castellana. ¿Lo más esperado? El paso de los 150 vehículos de tierra y las 84 aeronaves (58 aviones y 26 helicópteros) del desfile aéreo, que este año contará con una gran novedad: ocho Pilatus PC-21, los nuevos aviones de la Academia General del Aire y la Patrulla Águila.
[Los aviones más llamativos del desfile del 12 de octubre]
Por primera vez se mostrará ante el público el poderío y la maniobrabilidad de los Pilatus PC-21, también conocidos como E-27, una de las grandes adquisiciones del Ejército del Aire y del Espacio en los últimos años. Por sus características, es la aeronave ideal para el adiestramiento de los nuevos pilotos, que luego volarán en misiones reales a bordo de cazas de quinta generación como el Eurofighter.
La culminación del desfile aéreo, con la Patrulla Águila dibujando la bandera de España a su paso, será a bordo de los CASA C-101, también llamados 'Mirlo' y con 37 años de servicio a sus espaldas. Sin embargo, estas aeronaves están un paso más cerca de la retirada tras la llegada definitiva de los modernos Pilatus.
Un prodigio de la aviónica
Hace sólo unos días, la Academia General del Aire, situada en la Base Aérea de San Javier (Murcia), anunciaba que el nuevo Pilatus PC-21 había cumplido sus primeras 1.000 horas de instrucción. Es un dato que viene a confirmar la sustitución definitiva del C-101, que acumula más de 275.000 horas de vuelo a sus espaldas, todo un récord en las fuerzas aéreas.
[Spada 2000, el sistema antimisiles con el que España adiestra a militares ucranianos en Zaragoza]
La aeronave del fabricante suizo Pilatus Aircraft tuvo su primer prototipo operativo en 1997, pero no fue hasta julio de 2002 cuando se realizó el primer vuelo de prueba. El Ejército del Aire y el Espacio español empezó a recibir los pedidos en septiembre de 2021 y la última entrega se produjo este mismo junio, hasta llegar a las 24 unidades. El coste total del contrato para el Ministerio de Defensa alcanza los 205 millones de euros.
Se trata de una de las aeronaves más modernas en su clase y dadas sus características únicas se utiliza para el adiestramiento de pilotos en países como la propia Suiza, la primera en integrarlo en sus fuerzas aéreas, además de Australia, Reino Unido y Emiratos Árabes, entre otros. En total, se han construido más de 200 unidades.
Uno de sus rasgos distintivos es que permite el entrenamiento completo de los pilotos a un coste muy inferior al de un avión a reacción convencional, como el propio C-101, hasta un 50% menos por piloto. Es algo que va más allá del combustible que consume, sensiblemente menos que el C-101, y está relacionado con la construcción de su motor turboprop. Al ser un avión de hélice impulsado por una turbina Pratt & Whitney Canada PT6A, su mantenimiento también es mucho más sencillo y económico.
Tiene una longitud de 11,2 metros y una envergadura de 9,1 metros y dispone de espacio suficiente para los dos tripulantes, alumno e instructor de vuelo. Su peso en vacío supera por poco las 2 toneladas, mientras el máximo al despegue puede llegar a los 4.250 kilogramos, que se reducen a 3.100 en modo 'acrobático'.
El motor, que también se utiliza en aviones de entrenamiento similares como el Embraer EMB-314 Tuper Tucano, desarrolla 1.600 caballos de potencia, lo que permite al Pilatus PC-21 alcanzar una velocidad máxima de 685 kilómetros por hora y una autonomía de vuelo de 1.333 kilómetros. Su techo de vuelo se sitúa en los 11.580 metros, algo inferior al del C-101.
Últimas tecnologías
Además de su menor coste operativo y de mantenimiento, el verdadero motivo de la compra de estos aviones por parte del Ejército del Aire y el Espacio es que incorpora las últimas tecnologías, necesarias para instruir a los pilotos en el manejo de cazas de quinta generación y otras aeronaves, como el carguero Airbus A400M o los helicópteros NH90, totalmente digitalizados.
Así, los Pilatus permiten estrenar el Sistema Integrado de Enseñanza (ITS), del mismo fabricante suizo, que permite a alumnos y profesores la interacción con equipos y material actualizados. Y es que, junto a estas nuevas unidades, han llegado a la Base Aérea de San Javier nuevas estaciones de entrenamiento en tierra, con las que los alumnos de la Academia General del Aire empezarán a familiarizarse con los sistemas de los aviones más modernos.
La base murciana donde se adiestran los pilotos ha recibido un sistema de entrenamiento de salida, en el que los aprendices serán instruidos en cómo ponerse los cinturones y salir de la cabina en caso de emergencia; dos simuladores de procedimientos para practicar misiones específicas; y, por último, otros dos simuladores completos, que cuentan con tecnologías de realidad de simulación avanzada para ofrecer una experiencia lo más parecida posible al vuelo real.
Los nuevos Pilatus PC-21 serán así parte integrante durante los próximos 30 años de la Escuela de Vuelo Básica, que tiene como finalidad la selección de los alumnos por especialidades fundamentales (caza y ataque, transporte, helicópteros y RPAS). Para ello, los estudiantes reciben instrucción en dominio del avión y vuelo acrobático, vuelo en formación cerrada y dominio de los instrumentos de vuelo.
Por su parte, los C-101 se darán de baja de forma progresiva, hasta dejar el stock en 28 unidades. Estas serán operadas exclusivamente por la Patrulla Águila, que seguirá usando estas veteranas aeronaves en sus exhibiciones hasta 2030.