Así es D-GUN, el potente dron gallego que lanza hasta 5 granadas con precisión láser
Las empresas gallegas Aerocámaras y Arteixo Telecom han presentado un dron con capacidad para lanzar varias granadas de 60, 81 y 120 mm.
30 noviembre, 2022 02:59En la guerra de Ucrania, además del equipamiento militar más sofisticado, como el 'terminator' de la OTAN que España ya tiene en su Ejército, se está pudiendo comprobar la efectividad y versatilidad que ofrecen los drones. Y no sólo de los fabricados para su uso militar, como los Predator cedidos por EEUU a Ucrania. Milicianos de ambos bandos han logrado reconvertir algunos drones caseros en bombarderos capaces de soltar granadas y bombas sobre vehículos y tropas enemigas, con desigual resultado.
Esta ingeniosa reutilización es la que llevó a las empresas gallegas Aerocámaras y Arteixo Telecom a poner en marcha en tiempo récord el diseño y la fabricación del prototipo de D-GUN, el primer dron español de este tipo y uno de los primeros del mundo. Se trata de una plataforma muy versátil, que puede marcar la diferencia sobre el terreno gracias a su estabilidad, precisión y velocidad.
El desarrollo definitivo se puso en marcha hace apenas dos meses en Unvex, la feria de drones que tuvo lugar en septiembre en Sevilla. "Contactaron con nosotros personas del ámbito militar con esta sugerencia", explica a EL ESPAÑOL-Omicrono Jaime Pereira, CEO de Aerocámaras. "Desde el comienzo del conflicto entre Rusia y Ucrania nosotros ya habíamos iniciado los diseños para fabricar un dron de estas características", y de ahí la rapidez a la hora de tener listo su primer prototipo.
"Lo que se está viendo con los drones en Ucrania es un cambio de mentalidad. Generalmente estamos acostumbrados a ver cómo la industria militar va por delante en cuanto a desarrollos tecnológicos y luego eso se implementa en la industria civil", señala Pereira.
En Ucrania ha sucedido justo al revés, ya que se han utilizado drones caseros de manera improvisada para buscar nuevas soluciones. El objetivo del D-GUN es, precisamente, "profesionalizar ese cambio de papeles, para aportar una plataforma lo más fiable, estable y eficaz posible".
Disparando desde las alturas
El prototipo de D-GUN, presentado en la feria Sedexpo que se celebró hace unos días en Pontevedra, todavía tiene detalles pendientes de ultimar, pero ya ha participado en más de 300 pruebas con munición dummy —no explosiva y fabricada por impresoras 3D específicamente para estas pruebas, con la misma forma y peso que los proyectiles reales—.
D-GUN es un hexacóptero (tiene seis rotores) que puede alcanzar 55 km/h acarreando una carga de hasta 47 kg, en forma de 5 granadas de 60, 81 o 120 mm, aunque la versión presentada en la feria sólo tenía capacidad para 3 granadas de 60 mm. Esta munición va insertada en un tambor situado en la parte inferior del dron, que gira para dejar caer la munición sobre el objetivo u objetivos marcados.
El sistema es similar a uno visto por primera vez el pasado marzo, que corresponde al dron Revolver 860 y ha sido desarrollado por un fabricante taiwanés. Este modelo puede portar hasta 8 proyectiles de 60 mm y ha sido adquirido por Ucrania para realizar bombardeos por saturación sobre las posiciones rusas, según el medio polaco WP Tech.
UPDATE🧵 Say hello to the drone Revolver made by https://t.co/94XnZAkzW7 with a polish distributor. This bad boy can carry 8x60mm mortar rounds up to 8km with a flight time of 20min. The drone can also be equipped with thermal imaging. pic.twitter.com/R8zJLFMFTB
— Def Mon (@DefMon3) May 21, 2022
El D-GUN gallego "se puede operar de forma manual o por coordenadas", aclara Pereira. "El dron se carga antes del despegue con las granadas de 60 mm. Incorporamos una cámara térmica y una cámara HD para localizar objetivos tanto de día como de noche. Una vez localizados, marcamos coordenadas, nos situamos en la vertical y se efectúa el disparo". Eso permite una gran flexibilidad, ya que se puede utilizar un diseño de misión previo o el control por un operador en el bucle.
Eso sí, aclara Pereira, "ningún dron va a ser igual para un cliente y otro. Probablemente no tenga la misma munición, las mismas características ni los mismos tiempos de vuelo. Prácticamente hay que desarrollar un dron distinto para cada cliente". Aún así, el sistema de cámaras será una de las más que probables constantes, para que el operador disponga de imágenes en alta resolución transmitidas a su consola portátil, con un alcance de las comunicaciones de hasta 10 km.
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Para identificar el objetivo, la plataforma cuenta con un sistema de telemetría láser, una mejora sustancial en términos de precisión a lo que ofrecen, por ejemplo, los drones DJI Mavic adaptados que se han utilizado desde la invasión rusa de Ucrania y que la empresa china ha dejado de vender allí para "garantizar que nadie los use en combate".
En cuanto a la autonomía, uno de los grandes requerimientos en cualquier tipo de dron militar, en Aerocámaras están trabajando para ofrecer el mayor alcance posible. De momento, Pereira habla de "entre 17 minutos y dos horas", siempre dependiendo del tipo y el peso de la carga y la velocidad a la que se opere el UAV (vehículo aéreo no tripulado).
Este tipo de drones bombarderos, que por su tamaño y agilidad pueden eludir la mayoría de las defensas antiaéreas enemigas, pueden liberar su munición a unos 300 metros de altura. En esos casos, y en función del viento que haga, la desviación sobre el objetivo marcado oscila entre los 3 y los 5 metros.
La configuración inicial es la de lanzar proyectiles de 60 mm, pero el CEO de Aerocámaras insiste en que el sistema es fácilmente adaptable a otro tipo de armamento y municiones, incluyendo las bombas guiadas. Por eso D-GUN está recibiendo mucha atención, tanto por parte de las Fuerzas Armadas españolas, que podrían ponerlo a prueba antes de final de año, como de terceros países.
Ventajas militares
El desarrollo de este tipo de drones responde, además de a lo visto en tierras ucranianas, al plan director de RPAS (siglas en inglés de sistemas de aeronaves pilotadas por control remoto) del Ministerio de Defensa, publicado en 2015 y con la vista puesta en el presente y el futuro de esta tecnología.
Los drones son una herramienta versátil que está cambiando por completo las reglas de campo de batalla y que, según Pereira, "es una tecnología mucho más barata que la de vehículos como helicópteros, que además necesitan mucho más mantenimiento". El coste de una unidad, dependiendo de su equipamiento, está en torno a los 100.000 euros. Además, la formación de operadores, algo en lo que Aerocámaras es líder en España, también es mucho más rápida y sencilla, gracias "a la facilidad de manejo a través del software que tiene el dron. Eso permite formar a cualquier piloto del ámbito militar rápidamente".
Aerocámaras y Arteixo Telecom, que se ocupa de la parte de ingeniería eléctrica, también han aprovechado Sedexpo para presentar otro modelo de dron, en este caso disuasorio. Está pensado para controlar situaciones de riesgo o disolver grandes masas de personas, gracias a una potente luz que interrumpe la visión.
La duración del flash la determina el propio operador, teniendo siempre en cuenta los factores y medidas de seguridad que requiera la situación. Este modelo cuenta con una autonomía de 7 horas, y está diseñado para "garantizar el apoyo a la estabilización de situaciones que se salgan de control sin poner en riesgo la integridad física de las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado", según la propia web de la compañía.
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En cuanto a sus planes de futuro en el sector, Pereira asegura que la de defensa "va a ser una línea muy importante dentro de la empresa. Ahora mismo lo que estamos haciendo es aprender mucho de las peticiones que nos hacen los clientes para futuros desarrollos", concluye.