En la guerra no hay nada escrito. Las imágenes que van llegando a España del conflicto entre Rusia y Ucrania no solo muestran el horror de esta guerra, sino que revelan situaciones de lo más variopintas que se salen de lo común. Según apuntan medios rusos y ucranianos, Rusia habría derribado uno de sus propios helicópteros de ataque.

Según recogen el grupo Ucrania Weapons Tracker Defence Bloglas tropas de defensa aérea rusas han derribado un Ka-52 Caimán en la región de Zaporizhzhia, en Ucrania. El modelo habría sido un RF-91335, 43 Yellow "fue derribado por un Pantsir-S1 ruso en un incidente de fuego amigo en el óblast de Zaporizhzhia", según recoge el grupo.

No es un misterio que este helicóptero no es precisamente el que mejor publicidad tiene en este conflicto. Todo lo contrario; es el que más ha derribado Ucrania con diferencia, y aunque es el más potente de la fuerza aérea de Putin, presumen de una poca fiabilidad en combate. Y es que algunos reportan que el helicóptero tiene problemas de diseño.

Rusia derriba un helicóptero ruso

Imágenes del suceso muestran el helicóptero Ka-52 derribado en Zaporizhzhia. El vehículo aéreo ha quedado completamente destruido y calcinado, y los rumores apuntan a que dicha nave habría sido derribada por los sistemas antiaéreos rusos. Es decir, ha habido fuego amigo.

El porqué ha ocurrido esto exactamente es un misterio. Las causas podrían ser muchas; que haya habido un problema con el sistema Pantsir-S1 ruso, que los operarios del ejército se hayan confundido, etcétera. Según recoge Defence Blog, se está reportando que la tripulación del helicóptero sobrevivió a la caída.

Según el Ministerio de Defensa de Reino Unido, Rusia habría perdido al menos el 25% de su flota operativa total de helicópteros Ka-52. Y es que los servicios de inteligencia ingleses han explicado que de la flota de Ka-52 existentes, se habrían derribado al menos 23 helicópteros Caimán o en su defecto se habrían perdido desde que comenzara la guerra a principios de año.

De hecho, existen imágenes de sistemas de defensa aérea ucranianos derribando estos helicópteros. El propio Ministerio ha declarado que Rusia no es capaz de "mantener una superioridad aérea adecuada para llevar a cabo de manera fiable un apoyo aéreo cercano de ala fija cerca de la línea del frente".

Estos helicópteros estarían siendo derribados con un sistema de defensa conocido como MANPADS, caracterizado por ser muy compacto y que necesitaría uno o dos operarios para usarse. Esto, lógicamente, facilita las cosas a las unidades ucranianas, ya que al no necesitar de muchos operarios para usar este sistema, pueden transportarlo más fácilmente.

Helicópteros Ka-52

Estamos ante unos helicópteros que datan de los años 90. Se trata de un helicóptero de ataque biplaza de fabricación completamente rusa, y ha sido enteramente desarrollado a partir del Kamov Ka-50, o también conocido como Tiburón Negro. El modelo original tan solo cuenta con un espacio para el piloto en la cabina, mientras que el Ka-52 integra espacio para dos ocupantes.

Kamov Ka-52 Yuri Smityuk via Wikimedia

Comenzó a entrar en producción en 2008, y dispone de rotores coaxiales contrarrotativos que pueden soportar los disparos de armamento de calibre de 20 milímetros como máximo, así como un sistema de eyección. Este modelo añade a su plantel de avances tecnológicos pantallas con proyección de datos en el parabrisas, visor en el casco y un sistema de ataque integrado desarrollado por la propia Rusia.

Cuenta con una velocidad máxima operativa de 300 kilómetros por hora, con una velocidad de crucero de 260. El alcance es de 460 kilómetros y puede ascender hasta un techo de vuelo de 5.500 metros, con un régimen de ascenso de 12 metros por segundo. El diámetro del rotor principal es de 14,5 metros y puede soportar un peso máximo al despegue de 10.800 kilos.

Kamov Ka-52 Alex Beltyukov via Wikimedia

En cuanto al armamento, el Caimán tiene un amplio surtido de armas de ataca encabezado por un cañón móvil 2A42 de 30 milímetros con 240 cartuchos de munición perforadora y de fragmentación. Además, dispone de 6 anclajes externos ubicados bajo las pequeñas alas donde poder acarrear más armamento.

Por ejemplo, puede llevar misiles anticarro guiados por láser Vikhr —con un alcance de entre 8 y 10 kilómetros— y Ataka, lanzadores B8V-20 para cohetes S-80 de 80 milímetros no guiados y misiles aire-aire tipo Igla-V guiados por infrarrojo con hasta 6 kilómetros de alcance. En la defensa, el Caimán equipa un radar situado debajo de la cabina de los pilotos que se combina con contramedidas como bloqueadores electrónicos y de infrarrojos.

Ka-52

No obstante, estos helicópteros también son conocidos por otro detalle: algunos reportes afirman que el Ka-52 Caimán tiene un grave fallo de diseño (o varios) que afectan principalmente al doble rotor del dispositivo. El helicóptero tendría problemas con las vibraciones producidas por el motor que mueve dichos rotores.

Según Defence Blog, los Ka-52 están perdiendo parte del carenado del tren de aterrizaje principal, y que aunque parezca algo menor a corto plazo, puede derivar en problemas directos en los materiales de construcción y al desgaste de las juntas de elementos de vuelo importantes. La teoría apunta a que podría deberse a un fallo en el montaje del rotor de la aeronave, o bien debido a una falta de mantenimiento.

Otra posibilidad es un problema en el montaje de alguna de las palas, que pueden no haberse colocado correctamente o alineadas para compensar el resto de fuerzas a las que está sometido el helicóptero. Por el momento, los detalles sobre el origen de la gran vibración son escasos y teniendo en cuenta el hermetismo ruso es probable que nunca se llegue a saber. Más cuando no parece ser un problema que afecte a todas las unidades.

También te puede interesar...