En las próximas semanas se acelerarán las noticias sobre Blue Origin ante el inminente primer lanzamiento de su cohete New Glenn. Tras el éxito de su misión tripulada NS-26 con un grupo de turistas que visitaron durante 10 minutos el espacio, la empresa espacial de Jeff Bezos se prepara para un momento clave de su historia, el primer lanzamiento de su cohete New Glenn que servirá de transporte a la NASA en su estreno.

Según informa Ars Technica, a partir de este lunes 2 de septiembre, la compañía espacial planea trasladar la segunda etapa del cohete a la plataforma de lanzamiento 36 en la estación de la Fuerza Espacial de Cabo Cañaveral en Florida. Allí permanecerá para despegar con varias sondas espaciales el 13 de octubre como vehículo espacial de la misión ESCAPADE de la NASA con destino a Marte.

El pasado 19 de agosto, llegaron a Florida las dos naves espaciales gemelas de las misiones Escape y Plasma Acceleration and Dynamics Explorers (Escapade) de la NASA para comenzar los preparativos y la integración con el vehículo de lanzamiento. La próxima semana, seguramente la empresa realizará una prueba de fuego caliente con la etapa superior.

Primer etapa de New Glenn durante su construcción Blue Origin Omicrono

Esta etapa está propulsada por dos motores BE-3U. Como ya se ha visto con anterioridad en la preparación de otros cohetes, esta prueba supone encender los motores duran unos pocos segundos para probar que funcionan sin problemas antes del lanzamiento definitivo. La compañía ya ha perdido dos cohetes durante su traslado y pruebas que estaban destinados a misiones posteriores. 

Ambas etapas, la superior y la inferior, serán las que formen el cohete de forma definitiva en su lanzamiento. Solo un sistema de protección contra las inclemencias del tiempo se mantendrá para esta fase de pruebas al aire libre, se retirará para el despegue.

Blue Origin monta su cohete New Glenn Blue Origin Omicrono

New Glenn es un cohete de la empresa reutilizable y su primer cohete de clase orbital. Tiene una importante altura de más de 98 metros y un carenado de carga útil de 7 metros de diámetro, más grande que cualquier otro. Puede elevar casi 45 toneladas métricas de carga útil a la órbita terrestre baja. Sin embargo, su estreno será por todo lo alto.

Este será su primer vuelo de prueba sin tripulación y a pesar de ser un cohete sin experiencia de vuelo, la NASA le ha confiado una misión para su debut. En octubre, Marte estará lo suficientemente cerca de la Tierra para llegar. Si Blue Origin no consigue despegar, habrá que esperar otros dos años hasta que los planetas se alineen. En ese viaje se enviarán dos naves espaciales gemelas a Marte para estudiar el campo magnético del planeta.

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Blue Origin persigue ser rival de SpaceX como transporte espacial de la NASA. Para ello, deberá demostrar que puede realizar viajes sin graves problemas, al contrario que Starliner, de Boeing, incapaz de traer de vuelta a sus dos astronautas desde la ISS. Sin embargo, la empresa de Jeff Bezos encara este despegue inicial con cuatro años de retrasos.