Imagen del asteroide Bennu.

Imagen del asteroide Bennu. NASA Omicrono

Defensa y Espacio

La NASA actualiza y rebaja drásticamente las posibilidades de impacto contra la Tierra del asteroide 2024 YR4

La claridad de los cielos con la luna menguante ha permitido precisar el estudio del asteroide y rebajar la probabilidad de choque.

Más información: Armas nucleares, sondas y láseres: las opciones de la NASA para evitar que el asteroide YR4 choque contra la Tierra en 2032

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El estudio del asteroide 2024 YR4 que podría chocar contra la Tierra continúan hasta que a finales de marzo su trayectoría impida seguir precisando la probabilidad de impacto. En estas primeras semanas, la ONU ha activado el Protocolo de Seguridad Planetaria y las probabilidades de impacto han ido aumentando hasta un máximo histórico de 3,1%. Sin embargo, factores como los ciclos de la Luna dificultaban su estudio y alteraban los datos. 

La NASA ha querido dar un mensaje de esperanza tras semanas de tensión por el aumento considerable de las predicciones. "Nuestra comprensión de la trayectoria del asteroide mejora con cada observación", ha dicho al avisar que la probabilidad ahora se sitúa solo en un 1,5%.

Esta cifra llega tras haber calculado una probabilidad de un 2,3% este mismo lunes, e incluso, ofrecer nuevos cálculos con un 3,1%, la probabilidad más alta que la NASA ha registrado jamás en un objeto de este tamaño. Por su parte, la Agencia Espacial Europea (ESA) ha actualizado sus cálculos a 2,03%. No obstante, la agencia estadounidense explica que ha podido precisar mejor el porcentaje tras oscurecerse los cielos.

Imagen ilustrativa.

Imagen ilustrativa. Istock.

En época de luna llena, el cielo se vuelve demasiado brillantes para detectar estos débiles puntos de luz como se aprecia actualmente este asteroide. Ahora con la luna menguante, los cielos están más oscuros y los astrónomos pueden realizar mejor su trabajo. El miércoles 19 de febrero, nuevos datos recopilados durante la noche redujeron la probabilidad de impacto al 1,5%.

De momento, es pronto para precisar lo que ocurrirá en años. La NASA espera que la probabilidad de impacto continúe evolucionando a medida que se realicen nuevas observaciones del asteroide 2024 YR4 en los próximos días y semanas, según indican en el comunicado.

Según estas mediciones, la roca chocaría con la Tierra el 22 de diciembre de 2032. La comunidad internacional se afana por estudiar todas las variables. La observación del asteroide quedará suspendida a finales de marzo. Entonces, su órbita le alejará de la Tierra, hasta 2028. El asteroide tarda cuatro años en dar la vuelta al Sol, momento en el que será posible volver a calcular las probabilidades de un impacto y valorar acciones de defensa para proteger la Tierra.

Gráfico de las posibles ubicaciones de 2024 YR4 el 22 de diciembre de 2032 al 19 de febrero de 2025.

Gráfico de las posibles ubicaciones de 2024 YR4 el 22 de diciembre de 2032 al 19 de febrero de 2025. NASA Omicrono

Investigadores españoles también están pendientes de esta amenaza cuya repercusión sería tan grave como una bomba atómica sobre una ciudadtal y como explicaba esta misma semana Julia de León, investigadora del Instituto Astrofísico de Canarias, al EL ESPAÑOL-Omicrono. "El 99,9% de las veces, este tipo de alertas van disminuyendo la probabilidad de impacto con la Tierra, pero no ha sido así en este caso", decía la científica.

Para cuando sea imposible seguir al asteroide desde la Tierra, el telescopio espacial James Webb será el encargado de vigilar a esta roca. Este importante instrumento de observación espacial medirá a partir de finales de abril el recorrido del asteroide 2024 YR4. Este telescopio se enfocará en datos tan relevantes como el diámetro del objeto, lo que aclararía el peligro que realmente implica si llegara a chocar. 

También se están valorando otras posibilidades, como el choque con la Luna. En este caso, mucho menos probable (0,8%), el impacto sería más violento al no contar con la protección que ofrece la atmósfera en la Tierra. Aún así los restos de ese impacto llegaría a este planeta y se desarían en la atmósfera. 

El 2024 YR4 se mantiene en un nivel 3 de esta escala, de 10 posibles. Aquellos asteroides que se clasifican con los niveles más bajos apenas tienen posibilidad de chocar contra la Tierra, mientras que los que alcanzan los niveles superiores suponen una grave amenaza de impacto; y dependiendo del nivel las consecuencias varían. Por el momento ningún cuerpo celeste ha superado el nivel 4.