El portal web especializado en recopilar contenido importante de Internet ha vuelto a ampliar su contenido.

Archive.org es portal desde donde podemos encontrar un recopilatorio donde podemos encontrar (probablemente) casi todo aquello que ha existido alguna vez en la era de la informática. Podemos encontrar  no solo historiales de páginas web, sino también emuladores de algunas versiones de los sistemas operativos o programas más importantes que hayan existido.

Es el caso, por ejemplo, de los emuladores del software de los antiguos Mac, del que ya os hemos hablado incluso. Han vuelto ha incluir más y se merecen una revisión. Por aquel entonces podíamos probar incluso el SO de 1984, aunque aún faltaban (y siguen faltando) muchas versiones importantes.

System 6 y System 7

Para quién no esté familiarizado, System 6 y System 7 son los nombres que reciben dos de las versiones de MacOS, concretamente la de 1988 y 1991 (respectivamente). Por supuesto son emuladores muy básicos, donde apenas podemos hacer nada.

macbasic-emulador-mac

No obstante, también podemos probar aplicaciones en sí (y no solo sistemas operativos): tenemos MacWrite, Phraze Craze Plus, Brickles7.0, Prince Of Persia (una versión de 1992, no pensemos que es el juego moderno que todos conocemos hoy en día), Dark Castle, Airborne!, Lemmings (Demo), Roge o MacPaint (Version 1.5).

Hay algunos sobre los que tendremos especial cariño (los que hayan tenido algún Mac de esa época, al menos). Esto es, sobre todo, MacWrite o MacPaint, la aplicación de escritura y de pintura.

prince-of-persia-1992

Por norma general, menos el Prince Of Persia, funcionan todos muy bien. Este, en cambio, puede que vaya algo lento (debido a todos los recursos que tiene que cargar, aunque al fin y al cabo no son tantos). Aún así, se puede jugar perfectamente, aunque como adelantamos, no podemos esperar gran cosa: se trata de un emulador desarrollado en tecnología web.

Igual que la otra vez, estamos ante un software de una época en la que la informática seguía siendo en blanco y negro, por lo tanto donde ni había comenzado la guerra por los miles de millones de colores ni la de los píxeles (concretamente aquí teníamos 512 x 342 píxeles).

Tampoco existía aún ni la tecla Mayus, ni siquiera el botón derecho del ratón (estaba sustituido entonces por una pulsación larga del botón izquierdo).

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