Tres años después de su hipotético lanzamiento, la Surface Mini ha sido desvelada. Pero la verdad, se podría haber quedado donde estaba.

Aunque en la actualidad la marca Surface es sinónimo de calidad, en su momento Microsoft no lo tenía tan claro; en sus inicios, las Surface eran intentos de animar el mercado de tablets con Windows, mostrando el camino al resto de fabricantes.

Cuando en 2014 Microsoft presentó la Surface Pro 3, en Omicrono nos sorprendió por ser la primera tablet que realmente podía sustituir a un ordenador portátil; en muchos aspectos, la Surface Pro 3 fue el principio del camino que ahora sigue Microsoft con los últimos modelos.

Sin embargo, aquella conferencia podría haber salido muy diferente; porque hasta el último momento, el plan era presentar otro producto, la Surface Mini. Una tablet pequeña y ligera que estaría dirigida a un público completamente diferente al de la Surface Pro 3.

La Surface Mini que Microsoft estuvo a punto de presentar

La Surface Mini era la sucesora de la Surface RT, y por lo tanto, ejecutaba Windows RT; la versión recortada compatible con procesadores ARM que tan poco éxito tuvo. Tal vez ese es el motivo por el que Microsoft decidió no presentarla en el último momento.

En Windows Central han tenido acceso a una Surface Mini, un prototipo que parece terminado; es funcional y posee todas las funcionalidades y accesorios, así que parece que Microsoft realmente tomó la decisión en el último segundo.

Llamándose “Mini”, el tamaño es lo primero que llama la atención; cuenta con una pantalla de sólo ocho pulgadas, pero la resolución no está mal, de 1440 x 1080 píxeles. Pese a lo pequeña que es, la Surface Mini venía cargada de partes interesantes.

Por ejemplo, el dispositivo contaba con soporte integrado, al igual que sus hermanos mayores; así que podíamos ponerlo en posición para ver una película, para escribir, y una posición intermedia entre las dos. Claro, que con este tamaño probablemente no sería tan útil.

Hablando del tamaño, en realidad la tablet es más grande de lo que implican las ocho pulgadas de su pantalla; una razón es el soporte integrado, pero además la pantalla tiene grandes bordes. Pero esos bordes tienen una razón de existencia: tienen un ángulo tal que hace que la tablet se pueda coger fácilmente. Está diseñada desde el principio para tomar notas con el Pen, no para ser bonita.

Una tablet para llevar encima y tomar notas

Así es como Microsoft la iba a promocionar, como una tablet que podíamos llevar encima para tomar notas en cualquier momento; y por eso podemos llevar el Pen acoplado a la parte trasera de la carcasa en cualquier momento.

Como usa Windows RT, ya te imaginarás que usaba un procesador ARM diseñado para dispositivos móviles; en este caso era un Snapdragon 800 de Qualcomm acompañado de 1 GB de memoria RAM y 32 GB de almacenamiento interno.

Es difícil decir si la Surface Mini podría haber triunfado. Por una parte, es de agradecer que Microsoft decidiese no lanzar otra tablet con Windows RT; pero al precio adecuado, esta podría haber sido una buena alternativa a las tablets pequeñas que estaban de moda por aquel entonces.