Apple ha presentado este año tres móviles. A los dos esperados, los iPhone XS y XS Max, se suma uno que está llamado a ser un superventas, el iPhone XR. Este terminal está lejos de ser un iPhone barato, por mucho que sea un modelo que cuesta bastante menos que sus hermanos mayores. Los 859 euros lo posicionan como el único iPhone actual por debajo de la barrera de los 1000 euros y eso significa hacer algunos sacrificios ¿Será un móvil a la altura de lo que cuesta?

Muchos colores y marcos grandes en un diseño continuista

El año pasado Apple sorprendió con un cambio radical en el diseño del iPhone. Este año hemos visto una gran continuidad en el diseño, con cambios ligeros más allá de los colores. Pero el iPhone XR es el modelo de los tres que más ha cambiado, por la ausencia de doble cámara trasera y por tener un frontal algo distinto. Esto es así por el mayor tamaño de los marcos, que a primera vista es notable.

No nos equivoquemos, no es este un problema a la hora de usar el terminal pero el apartado estético es algo a considerar en cualquier producto de Apple.

Esto tiene una justificación técnica en el marco inferior dado que al tener una pantalla LCD el iPhone XR necesita más espacio en el marco inferior para alojar los conectores de la pantalla que otros modelos con paneles OLED. Eso explica por qué es más grueso que el de los iPhone XR. La cuestión es que en los laterales este tamaño se mantiene igual, así como en la parte superior, y aquí no hay un motivo técnico.

Son muchos los que defienden esta decisión por mantener una suerte de simetría visual, algo que se mantendría si adelgazaran los marcos laterales, haciendo al móvil incluso más fácil de coger.

Como decimos, no es esto un problema a la hora de usarlo pero sí es algo que, comparado con otros terminales, llama negativamente la atención. También tenemos que reconocer que tras un tiempo usando el terminal esto empieza a ser algo que se obvia, como la propia presencia del notch, que no es tan problemático como en Android dado que las notificaciones aparecen en los iconos de las aplicaciones.

En cuanto a los colores, hemos podido probar el amarillo y aunque personalmente no me ha gustado (a nivel estético) he de reconocer que la gente que lo ha visto ha opinado lo contrario. Esta gama cromática lo diferencia bastante de los demás iPhone y de los demás móviles y esta unidad, en amarillo, es el mejor ejemplo de ello.

El rey de la potencia

Si hay algo en lo que los móviles de Apple destacan sobremanera es en rendimiento y la potencia. El iPhone XR no es una versión reducida de los XS y XS Max y eso se nota. He usado juegos que había probado antes en Android, incluso en móviles más caros que este, y he de reconocer que Apple va por delante. Asphalt 9, HearthStone y otros juegos funcionan a un nivel increíble e incluso la velocidad de apertura de las apps es rápida. Pero hay excepciones. Por ejemplo Twitter me ha parecido más compleja de usar que en otros sitios y más lenta, pero no es que se esto problema de la potencia del iPhone.

El iPhone XR no es una versión reducida de los XS y XS Max

Aplicaciones muy exigentes como Inbox o Instagram se nos han abierto de manera muy rápida pero otras como Telegram se han abierto sin estar actualizadas y solo se han puesto al día al pasar al primer plano.

Otro aspecto que hemos comprobado que funciona realmente bien es la conectividad Wifi. Hemos hecho pruebas en una red inalámbrica de 600 Mbps teóricos y el iPhone XR nos ha dado, por Wifi, entre 400 y 450, una cifra realmente espectacular y que lo pone entre los mejores.

Por supuesto, no contamos con radio FM o jack de auriculares 3.5 mm, pero quien compra un iPhone ya sabe esto. Sí que se incluye la certificación IP67 que permite usarlo en entornos húmedos e incluso aguantar inmersiones accidentales.

FaceID es bueno, pero no perfecto

Dentro del rendimiento hemos de hablar de FaceID, un sistema al que muchos usuarios de Apple están ya acostumbrados pero que a mi no me ha convencido por dos motivos.

El primero de ellos es culpa de la interfaz. Al levantar el móvil la pantalla se enciende, algo lógico y bien implementado, pero al reconocer mi cara se mantiene en la pantalla de bloqueo. Sé que esto es para que pueda leer las notificaciones en la pantalla de bloqueo pero echo en falta el poder saltarme esto y entrar directamente en el escritorio.

El segundo de ellos es la fiabilidad del sistema. He probado muchos sistemas basados en el uso de cámaras y si bien no son tan seguros como este si que son más rápidos. Se supone que una de las ventajas del sistema de Apple es que al usar un sistema de infrarrojos no depende de la luz pero al probarlo en la cama, de noche, incluso estando boca arriba, al final suelo tirar del PIN, mucho más rápido. Es posible que sea porque usamos el móvil mas cerca de la cara de lo que debiéramos, pero no deja de ser una molestia. Esto también se aprecia cuando lo tenemos encima de la mesa, llega una notificación y queremos desbloquearlo sin cogerlo: difícil, a no ser que estiremos el cuello hasta una posición incómoda.

Espero que en el futuro Apple implemente también un sensor de huellas bajo la pantalla como hacen Huawei o OnePlus, aún manteniendo FaceID.

La pantalla no es la mejor, pero no es un problema

Junto a los marcos hay un elemento de este móvil que ha sido objeto de criticas: la pantalla. Apple ha optado por usar un panel LCD de menor resolución que los OLED que usan los iPhone X y XS.

Esto por sí mismo no es un problema pero es cierto que se nota la diferencia, no ya comparándose con móviles con pantallas de resolución 2K o QHD, sino con paneles FHD.

Dicho eso, como acabamos de explicar, eso no es un problema. Los vídeos, los juegos, la interfaz o las imágenes nos aparecen correctas y con unos colores acertados y vivos, sin llegar a saturar como sucede en otros modelos. Si sois de los usuarios que valora mucho la pantalla a la hora de comprar un móvil quizá sea mejor no que optéis por otro modelo, sino que veáis en vivo este antes de comprarlo. Personalmente no veo esto como algo que haga descartar el móvil en sí, pero es cierto que a un terminal de este precio se le exige ya ser casi perfecto.

En el uso diario vemos cómo el True Tone de Apple adapta la forma de ver la pantalla de manera bastante notable, lo que a veces hace que creamos que una foto se ve mal. Se puede desactivar, pero para hacer el análisis nosotros lo hemos dejado activo.

No hemos usado otras opciones como el Modo Noche, que elimina la luz azul, o el brillo manual. Aquí tenemos que hacer otro inciso y es que si bien el brillo no es escaso hemos visto que en algunas situaciones los reflejos en la pantalla se han vuelto incómodos. Situaciones muy concretas y exigentes, hay que decir.

Una cámara que gusta pero no enamora

Durante muchos años los iPhone han sido los mejores móviles en el apartado fotográfico. Han sido muchas las generaciones que Apple ha liderado, pero esto ya no es así.

Podemos valorar una cámara por la calidad de las imágenes simplemente pulsando en el botón, por el detalle obtenido o por la versatilidad de la cámara en su conjunto. Escojamos el parámetro que escojamos el iPhone ya no es el rey absoluto. Esto se aprecia más aún en el iPhone XR dado que solo hay una cámara.

La cámara trasera en el iPhone XR se compone de un único sensor de 12 Mpx, el mismo que usan como principal los otros dos modelos.

Hemos realizado decenas de fotografías para probar la capacidad de este terminal y las sensaciones han sido mayormente, que no exclusivamente, positivas.

La velocidad de disparo, la interfaz de la cámara o el rango dinámico están a la altura de lo esperado, rivalizando con cualquier otro smartphone.

No obstante a veces vemos que las imágenes son muy planas, no por fallos, sino por decisión de la propia Apple a la hora de procesar las imágenes. En los rostros esto hace que tengamos unos colores rojizos algo extraños. Pese a eso no podemos hablar mal de la cámara, que funciona sin fallos, tiene bastantes opciones de software y se comporta bien ¿Hay pegas? Sí, aunque voy a dejar claro que son más propias de mi forma de usar la cámara que de la calidad de la de este modelo.

Galería con fotos diurnas

Personalmente valoro mucho la versatilidad de las cámaras y suelo usar mucho elementos como el zoom óptico o el gran angular, si un móvil dispone de ellos, y en este análisis he vivido cómo la ausencia de estos elementos limita mi forma de hacer fotografías. Esto no debería ser un problema si no valoráis estas opciones, pero si lo hacéis es notoria su ausencia.

Se pueden echar en falta opciones como el zoom o el gran angular

Hemos querido comparar la cámara de este modelo no con móviles Android de gama alta, sino de gama media, terminales muy baratos. Hemos hecho esto para comprobar si como dicen muchos “podemos hacer lo mismo con un iPhone que con un móvil de 200 euros”. Para ello lo hemos enfrentado al Xiaomi Mi A1 en una ligera comparativa fotográfica.

Vemos cómo en situaciones de mucha luz, en paisajes exteriores, la calidad es similar, e incluso el detalle. Pero cuando el rango dinámico del sensor empieza a ser necesario la diferencia es más notoria. Lo mismo pasa en el modo retrato ya que el Xiaomi usa la segunda cámara mientras que Apple ha logrado implementar un sistema de desenfoque usando solo un sensor, similar al de los Pixel 3. Además podemos modificar el desenfoque a posteriori.

En mi opinión el recorte es mejorable. No así el desenfoque, que es posiblemente el mejor que puede verse en un smartphone. Además al usar un sensor con más angular tenemos unas fotos más amplias y con mayor calidad. Incluso en los iPhone el segundo sensor es de menor calidad que el principal.

De noche el XR es capaz de tomar muy buenas imágenes, controlando la exposición, los puntos de luz y manteniendo un buen equilibrio entre no mostrar mucho ruido en este tipo de tomas y no lavar la imagen creando el temido efecto acuarela. Esto se ve sobre todo en las fotos que necesitan hacer uso del buen rango dinámico que puede desarrollar el sensor.

Galería con fotos nocturnas

El vídeo es uno de los aspectos en los que más destaca el iPhone, no tanto en resolución o en opciones como en calidad global. Destacar sobre todo la estabilización óptica, incluso por la noche.

Por otro lado, tenemos una cámara delantera que si bien peca del mismo problema con el tono de la piel, nos da unas imágenes bastante buenas en circunstancias complicadas, como un contraluz. No tiene el mismo rango dinámico que la principal, pero nos ha dejado muy buenas sensaciones, mejores que la de la mayoría de terminales.

¿Hay un leve modo belleza aplicado? Sí, la realidad es que si nos fijamos vemos un ligero lavado en la zona de la piel, pero tampoco es algo dramático. O quizás a mi no me moleste porque estoy acostumbrado a marcas de móviles que aplican otros más agresivos.

Galería de selfies

Eso sí, de noche la calidad baja de forma dramática, el efecto belleza es más acusado y el flash delantero que se lanza usando la pantalla encendida no crea mejores imágenes.

Todas las imágenes han sido redimensionadas aunque no editadas. Si queréis verlas en su tamaño original, descargarlas o hacer zoom podéis hacerlo en el siguiente enlace:

• Galería con fotos en alta resolución

Dos altavoces para un sonido correcto

Los iPhone son de los móviles que más cuidan el apartado de sonido. El iPhone XR tiene dos altavoces, uno principal en el marco inferior, junto al conector lightning, y otro en el notch, que no obstante tiene mejor potencia.

El sonido que desarrollan los dos es bastante potente y claro aunque no llega a ser el más alto que hemos probado, en parte causado por la posición del principal. Al igual que en la mayoría de móviles se echa en falta que no se hayan implementado en la parte frontal pero dado que la mayor parte del mismo es pantalla, es comprensible.

Uno de los mejores iPhone en cuanto a autonomía

Apple ha implementado en este modelo una batería de 2942 MAh. Pero lo más relevante en este apartado, irónicamente, no es esa cifra, es la de su pantalla.

Que el iPhone XR tenga una pantalla de menor resolución que sus hermanos mayores es algo que ha originado muchas criticas pero tiene una contrapartida positiva: la autonomía.

Hemos hecho diversas pruebas en este sentido y la conclusión es que estamos ante un móvil que nos da más de un día de autonomía con un uso muy heterogéneo. Los hemos usado para hacer muchas fotos, realizar alguna llamada de teléfono, usado redes sociales y juegos como HearthStone o Asphalt 9. Hemos usado unas cinco horas de pantalla en total con 26 de autonomía desde el 100% hasta que nos ha saltado el aviso de batería baja, lo que no quiere decir que estuviéramos al 0%.

En tras pruebas, en las que hemos usado menos el móvil porque estábamos mas tiempo delante del ordenador, hemos superado las 4 horas de pantalla en casi dos días de autonomía.

Una parte muy negativa es la que aplica al cargador, al menos al que se incluye en la caja, dado que no usa carga rápida. Esto quiere decir que necesitamos entre dos y tres horas para cargar el móvil al completo, a no ser que optemos por otro cargador que nos permite disminuir este tiempo.

No parece de recibo que tras pagar mas de 800 euros por este terminal tengamos que soportar estos tiempos de carga. No es esto algo parecido a no incluir una funda o accesorios sino a hacer caso a los estándares actuales, aunque ya sabemos que Apple no se caracteriza por seguir las tendencias del mercado.

iOS es iOS, para lo bueno y para lo malo

Hablar de un iPhone es hablar de iOS aunque aquí hay que tener mucho en cuenta la procedencia de cada usuario. Si el comprador de este teléfono es un usuario de otro móvil de Apple no verá ningún problema y todo aparecerá donde debe, con la velocidad que debe y con las animaciones más fluidas y elegantes que he visto en un teléfono.

El problema es que si venimos de Android muchos gestos y acciones se nos hacen raras. Algunas para bien, como Reachability, que nos deja de manera sencilla usar el móvil a una mano. Otras, como los gestos, reconocemos que están mejor integrados que en Android, pero en ocasiones me han parecido menos prácticos. Irónico, pero es lo que tiene cambiar de móvil casi cada semana.

Objetivamente, pediría que Apple diera mas opciones, como la de saltarse la pantalla de bloqueo una vez que FaceID ha detectado nuestra cara, o que el propio FaceID funcionara de lado, y no sólo en posición vertical. Pragmáticamente soy consciente de que Apple tiene clara la forma de hacer las cosas, que las ejecuta y luego deja que los usuarios e adapten a ellas. O no. Pero eso ya no es culpa suya.

El iPhone XR es gran iPhone, pero un móvil caro

En todos los análisis que realizo llego a este apartado con una sensación concreta sobre si debo recomendar un móvil o no y a quién hacerlo. Aquí estoy mas perdido.

No es porque este móvil me parezca malo, ni veo un fallo que sea inexcusable, es simplemente que no entendería que alguien se gastara lo que cuesta este móvil. Con una excepción.

Hay usuarios que quieren comprarse un iPhone, por el motivo que sea: trabajo, rendimiento, diseño, marca… Muchos valoran la experiencia fotográfica y cómo el iPhone es capaz de mostrar vídeos, fotos… Si alguien me dijera que quiere un iPhone pero que no hará fotos extrañas ni le importa la resolución de una pantalla, sin duda le recomendaría este modelo. Si valora esos dos aspectos es mejor irse a los XS.

Este es el mejor iPhone si no haces muchas fotos y no pides la mejor pantalla

Pero ¿y si alguien me pide un móvil de buena cámara, buena batería, buen diseño, buen rendimiento y buena pantalla sin importar la marca? Entonces tendría mas problemas a la hora de recomendar este porque podrían pasar dos cosas.

La primera es que el dinero no sea relevante, en cuyo caso recomendaría un iPhone XS o XS Max. La segunda es que el dinero sea importante, en cuyo caso recomendaría un OnePlus 6T o un Xiaomi Mi 8, dos móviles que salvo en sistema operativo, pueden luchar perfectamente contra este iPhone XR.

Pese a eso, este modelo es, para los amantes del iPhone a los que no les da igual el dinero, posiblemente el mas interesante.