Huawei, uno de los principales fabricantes chinos, se enfrenta al momento más crítico de su historia. Su acuerdo comercial con Google se ha roto; y eso significa que Huawei no podrá seguir vendiendo smartphones con Android y Google Play, además de las apps de Google.

Una decisión que no viene de Google, sino del ejecutivo de Donald Trump. El gobierno estadounidense se encuentra en medio de una guerra comercial con China, en la que las empresas y los usuarios son los daños colaterales; cada gigante está decidiendo hasta qué punto puede vivir sin el otro, con una serie de aranceles impuestos a todo tipo de productos importados y exportados.

Huawei pierde acceso a los procesadores Intel

A eso se le suma la prohibición de tratar con compañías extranjeras sin la aprobación directa del ejecutivo. Huawei es la gran afectada por ahora, especialmente después de las recientes acusaciones de espionaje asociadas con su división de comunicaciones. Aunque Huawei ha asegurado una y otra vez que no trabajan para el gobierno chino, la mayoría de países occidentales están siguiendo los pasos de Trump.

La prohibición de usar Android con Google Play es, sin duda, la que tendrá más consecuencias para Huawei; pero no es lo único que ha perdido en las últimas horas. Otros suministradores estadounidenses de Huawei han decidido cortar relaciones de manera inmediata; y entre ellos se encuentran los principales fabricantes de chips y procesadores del mundo.

Intel, Qualcomm y Broadcom han “congelado” sus acuerdos con Huawei, pocas horas después de que lo hiciese Google. En los dos últimos casos, son nuevos golpes a la división móvil de la compañía, pero en el primero afectará más a sus portátiles. Porque Huawei no solo vende portátiles, sino que además son de esos que hay que tener en cuenta. Modelos como el MateBook X presentado a principios de año son una alternativa que nos recuerdan a los MacBook de Apple, pero con Windows, por supuesto.

¿Qué pasará con los MateBook?

Huawei ha sido capaz de conseguir un formato muy ligero y con un diseño atractivo en sus portátiles, en parte gracias a los nuevos procesadores de Intel. Pero con esta decisión del gobierno estadounidense, tendrá que buscar procesadores en otro sitio. Sin embargo, según Bloomberg, esto no se notará inicialmente, ya que Huawei hizo compras masivas de procesadores y chips, una cantidad suficiente como para seguir produciendo portátiles durante tres meses.

Además, oficialmente el acuerdo con Intel sólo se ha “congelado”; por lo que siempre cabe la posibilidad de que se ponga en marcha cuando el gobierno estadounidense relaje sus políticas. Asímismo, queda la gran duda de si Huawei puede seguir usando Windows. Por el momento, Microsoft no ha realizado ninguna declaración al respecto.

Pero si Huawei termina su reserva, puede que no tenga más remedio que cambiar de proveedor, pero ¿a cuál? AMD probablemente se encontrará en una situación muy similar a la de Intel. La otra alternativa es diseñar sus propios chips, pero eso no es algo que se pueda hacer en tan poco tiempo. Así las cosas, que la gama MateBook desaparezca momentáneamente parece algo asegurado.