Se ha anunciado el lanzamiento en España y el resto del mundo del Odyssey G7, el nuevo monitor gaming de Samsung. Un modelo muy esperado desde que fuese anunciado oficialmente a principios de año.
Hay pocos sectores más competitivos que el de los productos gaming, especialmente si hablamos de monitores. En estos productos, la calidad de imagen y la resolución suelen pasar a un segundo plano, siendo más importante la velocidad de respuesta y la frecuencia de actualización; no es como el Space Monitor de Samsung, que estaba pensado para la oficina.
Eso es porque a los jugadores les interesa más poder reaccionar antes a lo que ocurre en la pantalla, y sienten que es injusto que el monitor añada algo de retardo a las imágenes al no ser lo suficientemente bueno.
Así es el nuevo monitor gaming de Samsung
Es por eso que los monitores gaming no suelen tener muchas florituras en lo que respecta a la calidad de imagen o el formato. Suelen tener un formato tradicional, ya que lo que suele importar más es la calidad del panel.
Pero eso no tiene porqué ser así, y el Odyssey G7 puede ser una demostración de esto. Estamos ante un monitor gaming curvo, algo que ya es no demasiado común de por sí; pero lo realmente llamativo es que se trata del primero de su tipo con una curvatura 1000R.
Eso significa que el Odyssey G7 tiene un radio de curvatura de 1000 milímetros, por lo que es mucho más envolvente de lo normal en un monitor curvo cualquiera. El objetivo de los monitores curvos es envolvernos en la imagen, para que esta ocupe no solo nuestra visión frontal, sino también nuestra visión periférica. Es una sensación atrapante, pero lamentablemente eso depende en buena medida de la curvatura.
Con el Odyssey G7 y su curvatura 1000R, Samsung pretende demostrar que es posible ofrecer esa inmersión, incluso en modelos de 27 y 32 pulgadas, que son los que estarán disponibles. Además, no son modelos 'ultrawide', sino de proporciones normales, 16:9.
Muy rápido, como debe ser
Esta apuesta por una curvatura extrema no significa que este monitor gaming falle en lo más básico; Samsung apuesta por paneles con tiempo de respuesta de 1 ms y una tasa de refresco de nada menos que 240 Hz. No es lo más rápido del mundo, pero es lo siguiente mejor.
Es decir, que en ambos aspectos son lo máximo a lo que puede aspirar un jugador actual; no deberíamos tener problemas en jugar a cualquier título en estos monitores.
Es interesante que el 'sacrificio', si es que se puede llamar así, sea la resolución, que se queda en 2560 x 1440 píxeles; digo esto porque las resoluciones 4K no suelen ser tan importantes, especialmente si no tenemos un hardware lo suficientemente potente. Además, en lo que respecta a la calidad de imagen, el panel la tecnología Quantum Dot de Samsung, con la que ha contrarrestado a los paneles IPS tan populares en este sector.
El Samsung Odyssey G7 estará disponible en España en este mismo mes de junio, a un precio por determinar. Se suma al G9, un auténtico monstruo que fue presentado junto al G7.