Tras el evento que Apple celebró el pasado septiembre, la compañía ha lanzado en España sus nuevos Apple Watch Series 6 y SE así como la renovación de su tableta más barata y popular: el iPad, que alcanza ahora la octava generación del dispositivo.

Para no perdernos en el catálogo de las tabletas de Apple, de menor a mayor precio, tenemos: el iPad (de 8ª generación), el iPad mini, el iPad Air -también renovado-, y los iPad Pro que fueron actualizados el pasado mes de marzo. 

Así pues, el nuevo iPad sin apellido parte de los 379€ y renueva al modelo lanzado el año pasado basándose en la misma estrategia: mantener el estilo y el diseño pero añadirle la suficiente potencia en su interior para que le podamos pedir casi cualquier cosa y que rinda con nota. 

Un iPad más rápido

Pese a ser el modelo de entrada en la categoría el iPad de octava generación es muy rápido, mucho más que tablets de la competencia en el mismo rango de precio. Apple lo consigue gracias a aprovechar el procesador A12 Bionic que equipaba en sus iPhone XS, y con el que por primera vez el iPad más barato trae capacidad de aprendizaje automático. 

Con 6 núcleos de CPU, 4 de GPU y 8 de Neural Engine, el nuevo iPad no es sólo un 40% más rápido en procesamiento y dos veces más rápido que la generación anterior, sino que es capaz de gestionar una altísima capacidad de trabajo a un precio comedido. Así, la multitarea, aplicaciones pesadas e incluso editar fotos y videos desde iCloud será posible en este tablet. Eso sí, si queremos exigirle un poco más y dar el salto a una calidad profesional compensará ir a otro modelo mayor. Todo depende de nuestras necesidades. 

La potencia de Neural Engine hace que el salto de calidad con respecto a la generación anterior se note especialmente en el apartado gráfico. Ahora tenemos una experiencia mucho más fluida, que en apps pesadas como edición de foto, vídeo o gestión de realidad aumentada, se agradece.

Y es que la potencia del iPad hace que, salvo por diseño o exigencia concreta, sea el iPad que más fácil se puede recomendar para el gran público. ¿Quieres una tablet que se mueva con soltura, que te permita trabajar, jugar a videojuegos, ver una película, gestionar documentos o tomar notas sin que renquee? Este iPad es para ti. 

Más allá de la potencia del nuevo corazón del iPad, gran parte de su nuevo potencial está en iPadOS 14. Tenemos mejor integración de los widgets, mejor multitarea, así como un detalle mayor del lápiz con el que será más cómodo tomar notas. Eso sí, aún no podremos usar Scribble en castellano, la opción para que el iPad nos transcriba las notas. Sí podremos eliminar, seleccionar, insertar o unir textos únicamente con el lápiz.

Más allá de la compatibilidad con el Apple Pencil de primera generación, este iPad cuenta con Smart Connector, con lo que podremos comprar la funda Smart Keyboard para tener un teclado listo en cualquier lugar, o bien comprar la Combo Touch de Logitech, que incluye trackpad. Además, también podremos conectar un ratón externo bluetooth o el Magic Trackpad. La tablet es versátil y sirve tanto para ocio como para trabajo. 

El chip A12 también es más eficiente y pese a que su capacidad de rendimiento ahora es mayor mantiene las 10 horas de uso que permiten llevar el iPad todo el día sin importar dónde hay un enchufe.

Diseño y cámara

En el apartado de diseño tenemos pocas novedades. Apple sigue apostando por aluminio reciclado para el cuerpo mientras que tenemos una pantalla Retina con unos marcos generosos con TouchID en la parte inferior.

La resolución del panel es de 2.160x1.620 a 264 ppp y con un brillo máximo de 500 nits, su respuesta es muy buena tanto al dedo como al Apple Pencil, que sigue siendo un elemento muy cómodo con él. 

Por lo demás seguimos teniendo 25,06 cm de alto, 17,41 cm de ancho, 0,75 cm de grosor y encontraremos una ligera variación en el peso con 3 y 2 gramos más de peso en las versiones WiFi y Cellullar, respectivamente, con respecto a la generación anterior: 490 y 495 gramos para ambas. 

Tampoco hay cambios en sus cámaras. Sigue disponiendo de un gran angular en la parte trasera de 8 megapíxeles con una apertura f/2,4 con grabación de vídeo en 1080p HD a 30 f/s, así como una cámara frontal FaceTime HD de 1,2 megapíxeles. Capacidad suficiente para reuniones o clases a distancia, pero que se quedan cortas si las enfrentamos con la capacidad fotográfica del iPhone 11.

¿Me lo compro?

El iPad de octava generación es el iPad para todos, el rey de la relación entre calidad y precio. Podemos tener por menos de 400 euros un equipo pensado para durar años por la capacidad actual y por la distancia que lleva a sus rivales. 

Nos puede servir tanto para jugar a videojuegos -funciona especialmente bien con Apple Arcade-, como para trabajar en cualquier lugar o simplemente relajarnos con algo de lectura, navegar por internet, o atiborrarnos de series. El iPad siempre estará dispuesto a lo que le pidamos. 

Eso sí, hemos de ser conscientes de que si nuestras exigencias van a subir de nivel y vamos a aprovechar la tablet de Apple para continuas tareas duras es mejor saltar al iPad Air o al iPad Pro. Aunque el iPad de octava generación será capaz de gestionarlas en su mayoría, la experiencia será mucho más fluida saltando a los modelos superiores. 

En suma, el iPad de octava generación es el ideal si queremos un iPad sin complicaciones, para nuestro día a día. Eso sí, aunque parte de los 379 euros, esa versión es para 32 GB de memoria, con lo que interesará subir en 100 euros hasta los 479 euros para tener 128 GB de almacenamiento.