Intel va a construir una fábrica de grandes proporciones en Ohio para hacer frente a la escasez de chips que sufre el sector. Este anuncio coincide con la confirmación de que la compañía presentará en menos de un mes un procesador dedicado a la minería de criptomonedas, un hardware con un bajo consumo de energía y que podría liberar la carga del mercado de componentes.

Los fabricantes de chips alertan que la escasez inflará los precios de los productos tecnológicos y sus consecuencias se alargarán varios años. Además de diversificar los equipos para que unos consumidores no acaparen los productos destinados a otros, los fabricantes apuestan por abrir más fábricas en todos los continentes.

Al igual que Bruselas quiere fomentar un ecosistema europeo de chips para no depender de la fabricación de estos en Asia, Estados Unidos tiene el mismo objetivo. La nueva fábrica de Intel forma parte de esa estrategia con 20.000 millones de dólares de inversión inicial. 

Fabricar e innovar

Situada en New Albany, localidad de Ohio, el fabricante abrirá varias plantas de fabricación en un terreno de 1.000 acres (4 Km2). La compañía asegura en su comunicado que establecerá dos nuevas fábricas de vanguardia en esta región. En su interior, 3.000 empleados se dedicarán no solo a fabricar, sino también a desarrollar y fabricar.

Los planes sitúan en 2025 la inauguración de la fábrica, comenzando a finales de este 2022 el inicio de las obras de construcción, que darán también empleo a 7.000 personas. Pensando en el impacto medioambiental que puede implicar este proyecto, las instalaciones se diseñarán para funcionar con electricidad 100% renovable y lograr un uso neto positivo de agua y cero residuos totales en los vertederos, en base a los objetivos de sostenibilidad que Intel se ha propuesto para 2030.

Estas nuevas plantas de fabricación respaldarán la creciente demanda del nuevo negocio de fundición de la empresa, Intel Foundry Services (IFS), con el que la presta servicios a terceros, como a los fabricantes de automóviles. "Las fábricas de Ohio están diseñadas para la 'era Angstrom', con tecnologías fundamentales para habilitar productos de próxima generación en una variedad de aplicaciones, desde dispositivos móviles de alto rendimiento hasta inteligencia artificial", ha dicho Dr. Randhir Thakur, vicepresidente senior y presidente de Intel Foundry Services.

"Recuperar liderazgo de EEUU"

La revista Time, describe la apertura de esta nueva fábrica como "la inversión más grande del sector privado en la historia de Ohio". En la región se han establecido últimamente centros de datos de Google, Facebook y Amazon.

Además del impulso que puede suponer la contratación de todos estos trabajadores en la zona, desde Intel se han comprometido a respaldar el desarrollo la región con 100 millones de dólares adicionales para ayudar a asociaciones con instituciones educativas y fomentar la creación de talento y programas de investigación. "Las nuevas instalaciones de Intel serán transformadoras para nuestro estado" ha dicho el gobernador de Ohio, Mike DeWine.

Aunque la nueva instalación no podrá contribuir a la escasez actual de semiconducotres hasta que en 2025 se terminen las obras, Pat Gelsinger, CEO de Intel, considera que "las acciones de Intel ayudarán a construir una cadena de suministro más resistente y garantizarán un acceso confiable a semiconductores avanzados en los años venideros". Además, añade que supone un esfuerzo significativo con el que "Intel lidera el esfuerzo por restaurar el liderazgo en la fabricación de semiconductores de EEUU". 

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