Es normal que muchos de nosotros utilicemos contraseñas en páginas de Internet o foros que requieran de una, correo electrónico o cualquier otro servicio. Y nos podemos llegar a plantear, ¿es nuestra contraseña segura?.

Como acabamos de mencionar, quizás seas de esas personas que se registran en varios foros, páginas webs o servicios que requieren de una contraseña web para identificarse. Quizás usas la misma en varias cuentas o siempre vas cambiando.

Cabe destacar que muchos expertos en Internet, recomiendan que para cada nuevo registro, se utilice una contraseña nueva, y que sobre todo, se cambie con regularidad.

A continuación, veremos una clase de consejos y trucos para salvaguardar nuestra seguridad en Internet y cualquier servicio o cuenta que poseamos.

Paso 1: Eligiendo una buena contraseña segura y difícil de descifrar

Esto es un hecho comprobado, cuanto más fácil sea tu contraseña, más fácil de descifrar es. Y sí, ya sé que es más fácil para nosotros de recordar pero puede llegar a ser un peligro para nuestra privacidad una contraseña fácil y sencilla de conocer.

Por eso lo más importante es elegir una contraseña que sea bastante difícil y que tenga una sucesión de caracteres, lo que la hará más difícil de descifrar.

Paso 2: no utilizar la misma contraseña para todos nuestros perfiles o cuentas

Esto es algo que quizás muchos hagan, utilizar una misma contraseña para los diversos perfiles que posee en Internet o cuentas bancarias, etcétera. Y esto (aunque sea una contraseña difícil de descifrar) puede ser un problema.

¿Por qué?, fácil. Imaginemos el hipotético caso de que una web donde estamos registrados, sufra un ataque por parte de ‘hackers’ y que estos consigan recopilar la información de los perfiles de los usuarios.

Puede que con la contraseña obtenida, intenten probar en otros servicios para comprobar si nuestra contraseña es la misma. Podría ser peligroso, ¿no?

Paso 3: cuando más larga, mejor

Aquí el tamaño si importa. Cuando una contraseña es más larga, tiene menos posibilidades de ser descifrada, ya que a más caracteres se dificulta la tarea de poderla descifrar y conlleva además, un aumento en el tiempo para poder ser descifrada.

Paso 4: combinación de caracteres

Como ya comentamos anteriormente, una contraseña altamente recomendable es aquella que combine varios tipos de caracteres: símbolos, letras en mayúscula y minúscula, números.

Esto sin duda le otorgara  a nuestra clave, un nivel bastante alto de seguridad y de impermeabilidad de cara a posibles ataques para descifrarla.

Paso 5: opciones de recuperación de contraseña

Puede que este punto sea uno de los más importantes aunque no lo creas. Para entender por qué puede llegar a ser una “puerta trasera” para poder entrar a nuestros datos, pondremos el siguiente ejemplo:

Todos nos hemos visto con la opción de configurar las “preguntas secretas” de servicios como correo electrónicos u otros. Preguntas tales como: “Nombre de tu mascota”, “Lugar de nacimiento de la madre”, “Nombre de nuestro primer profesor”, etcétera.

Y, ¿qué hay de malo en elegir estas preguntas?, pues algunas pueden ser adivinadas si se busca un poco de información sobre ti o ni tan si quiera eso.

Por ejemplo: un compañero nuestro de la infancia puede saber el nombre de nuestro primer profesor; el nombre de nuestra mascota puede llegar a ser más fácil todavía, ¿por qué?, sencillo. En las redes sociales se comparten muchos datos y ese es un lugar donde se puede descubrir fácilmente esta respuesta.

Existen muchos más parámetros y pasos que podríamos añadir a estos, la verdad es que lo más importante es ser cautos y tener cuidado con qué contraseñas elegimos.

Como información extra, podríamos usar algún programa como Wolfram Alpha, que nos ayuda a crear contraseñas seguras o también otra muy recomendable, es el programa KeePass.