7 métodos de identificación biométrica
La identificación biométrica se ha convertido en una excelente manera de identificarnos en los sistemas informáticos.
17 enero, 2015 11:11Noticias relacionadas
Echadle un vistazo a vuestro teléfono móvil, y podréis comprobar que existen varios métodos para identificaros con el usuario que tengáis. Sin embargo, hay uno que ha resultado ser tremendamente efectivo: la identificación biométrica. Básicamente, se trata de un método gracias al que podemos identificarnos con nuestro cuerpo, ya sea utilizando el iris del ojo, una huella dactilar o nuestra propia cara.
Es evidente que existen algunas identificaciones realmente impresionantes. Vamos a echarle un vistazo a algunas de las más curiosas:
Usando las orejas para la identificación biométrica
No hay dos seres humanos en el planeta que tengan las mismas orejas. Por ello, podemos utilizar estas partes del cuerpo para identificarnos. Aunque todavía se trata de un método en construcción.
Utiliza el corazón
Si, lo habéis adivinado. Se puede utilizar la frecuencia cardíaca para que un sistema nos reconozca. Cada uno tenemos nuestros propios pulsos ¿no?
La forma de sentarnos dice mucho
Puede parecer sorprendente, pero nuestro trasero nos echará una mano en más de una ocasión. Según la manera en que nos sentemos, una máquina puede conocernos… o no. Tened cuidado la próxima vez que os sentéis en un sillón de las tiendas.
Échale un ojo
Los escáneres biométricos, utilizando el ojo para identificarnos, son ya lo suficientemente famosos como para los conozcamos. Ponemos el ojo (no el propio, sino la cara en la máquina), nos reconoce el mismo, y nos deja acceder. Fácil, sencillo y para toda la familia.
Usa la nariz
Al igual que se puede utilizar el ojo, también se puede usar la nariz, teniendo en cuenta aspectos como la curvatura o el tamaño, en general.
Las famosas huellas dactilares
Las huellas dactilares ya se usan en algunas dispositivos, con el fin de acceder al contenido. De esta manera, ponemos los dedos en la superficie que sea, y el sistema nos la detecta, comparándola con una base de datos.
Oliendo el acceso
El sistema también puede emitir algún tipo de olor que nosotros tengamos que reconocer. Sólo un humano puede ser capaz de hacerlo. Imaginad que, por ejemplo, tengamos que oler el perfume que usamos a diario.
De todas formas, aunque os parezcan pocos, es muy probable que se vayan utilizando nuevas partes del cuerpo para realizar este tipo de comprobaciones. ¿Os imagináis, por ejemplo, que se utilicen las arrugas de la cara?
Vía | Popsci