El próximo 12 de enero se producirá oficialmente el fin de soporte de Windows 8, el sistema operativo con el que Microsoft quería comerse el mundo.

El frío recibimiento de Windows 8 en octubre del 2012 por parte de los usuarios se puede comparar con fracasos sonados como Windows Millenium o Windows Vista.

Al igual que entonces, con Windows 8 Microsoft cogió un sistema operativo que para la mayoría cumplía bien su función (Windows 7), e intentó reinventar la rueda, en este caso dejando el escritorio de lado y centrándose en una nueva interfaz diseñada especialmente para dispositivos táctiles, concretamente las tablets que en aquel momento se decía que iban a matar completamente al PC.

Se acerca el fin de soporte de Windows 8

Pero resulta que la inmensa mayoría de usuarios usaba Windows en un ordenador, y esperaba que el sistema operativo estuviese diseñado para sus necesidades y no para las de dispositivos que probablemente no comprarían, y eso no ha cambiado nada en los mas de tres años que han pasado del lanzamiento de Windows 8.

Entre eso, y la bajada generalizada de ventas de ordenadores nuevos, Windows 8 fue un fracaso tan sonado que desde entonces Microsoft está intentando recuperarse. Lo primero que hizo fue lanzar Windows 8.1 como respuesta a las quejas de los usuarios, y el pasado 2015 presentó Windows 10 como el sistema sobre el que construiría su futuro.

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El próximo 12 de enero es el último día que Windows 8 podrá recibir actualizaciones de seguridad, marcando su fin a todos los efectos. Sin embargo, no será un gran funeral porque hay una manera muy sencilla de seguir recibiendo parches de seguridad: actualizar a Windows 8.1, que seguirá recibiendo actualizaciones de seguridad hasta el 10 de enero de 2023.

Si por algún motivo aún no has actualizado a Windows 8.1, deberías hacerlo; es gratis y no hay grandes cambios respecto a Windows 8. Y una vez que hayas actualizado a Windows 8.1, podrás actualizar gratis a Windows 10.

Fuente | Softpedia