Si hablamos de mensajería instantánea, probablemente trataremos de Whatsapp, Telegram, Hangouts o Facebook Messenger; pero estos servicios líderes no hubieran llegado a nada si no fuera por otras apps, ahora olvidadas o abandonadas.

AIM era una de estas apps, que en su momento era una de las grandes alternativas para chatear por Internet en la década de los 2000; especialmente en el mercado estadounidense, donde llegó a dominar el mercado (acaparando el 52% de los usuarios de mensajería).

Y todo por ser un servicio integrado en America Online (AOL), uno de los proveedores de Internet más populares; sin embargo, también era muy usado fuera de EEUU, sobre todo cuando se independizó en su propia app.

El cierre de AIM supone todo un cambio generacional

Toda una generación ha podido conectar con sus amigos, familiares y seres queridos gracias a AIM; y de hecho, se calcula que en la actualidad millones de usuarios seguían conectándose. La mayoría personas mayores, que ya estaban acostumbradas a su funcionamiento; AIM es uno de esos servicios que más ha sufrido el cambio generacional que ha aupado a otros como Whatsapp.

Aunque AIM dio el salto a los nuevos sistemas como iOS y Android, nunca llegó a conectar con este nuevo tipo de usuario. AIM ha supuesto una influencia tremenda en el sector, una base sobre la que se han construido sistemas más seguros, completos y modernos.

Por eso es una pena que AIM muera sola, sin nadie que celebre su vida y obra. Desde que fuera comprada en 2015 por Verizon, AOL ya no es el gigante que era; de hecho, el legendario nombre de AOL también está cerca de desaparecer, después de ser fusionada con Yahoo para formar Oath.

AIM es una reliquia de otros tiempos. La nostalgia no debería cegarnos, ya que a estas alturas no hay manera de redimir un servicio tan obsoleto como AIM; pero eso no quita que no podamos saludar a un guerrero que durante una década fue la referencia a batir.