Matthew Mellon convirtió 2 millones de dólares en 1000 millones. Por increíble que parezca, este descendiente de banqueros invirtió en criptomonedas, concretamente en Ripple (XRP), multiplicando cuantiosamente su inversión inicial y convirtiéndolo en infinitamente rico. El pasado 16 de abril murió, y todo este dinero (además de otras cantidades desconocidas en otras criptomonedas) se ha perdido, y posiblemente para siempre.

Los familiares han tratado de recuperar la cuantiosa cantidad económica y, debido al diseño técnico de las criptomonedas, está siendo imposible. La única manera de acceder a sus criptomonedas sería encontrando la clave, por ejemplo, en un papel escrito o en un archivo de su ordenador.

Precisamente las criptomonedas están enfocadas a esto mismo, para aumentar la seguridad con respecto a otros sistemas bancarios. En cambio, si Mellon hubiese usado alguna plataforma online para almacenar sus criptomonedas, nada de esto hubiese pasado y la familia hubiera podido recuperar todas las criptomonedas por medio de la empresa que gestionase esas criptomonedas.

Muere y se pierden sus 1000 millones en criptomonedas

Y esto de que las criptomonedas sean tan seguras al mismo tiempo es una gran maldición: no es la primera vez que alguien muere y se pierden miles de millones de dólares en criptomonedas; incluso no hace falta morar, puedes estar vivo y coleando y que se te quede la cara de pasmado porque un día te levantas y has perdido la clave de acceso o simplemente la has olvidado, perdiendo toda la fortuna que tenías almacenada.

Es tan sencillo perder las criptomonedas que tenemos habiendo roto la pantalla del teléfono en el que teníamos un monedero local con el dinero virtual. En este caso, por ejemplo, aún teniendo la contraseña, seguiría siendo imposible acceder a las criptomonedas.

Solo en Bitcoin, se calcula que hay 4000 millones de dólares perdidos

Es lo que le pasó a un británico, por ejemplo, que lleva años buscando su antiguo disco duro en un vertedero debido a que lo tiró en una mudanza sin acordarse que tenía las monedas virtuales dentro. En aquel momento no valía mucho, pero ahora valen decena de millones de euros ¡Imagina que tienes tanto dinero en tu posesión pero que están en la basura… y no los encuentras!

Cómo preparar nuestras criptomonedas para cuando muramos

Dada la incapacidad técnica de recuperar las criptomonedas de alguien cuando muera sin tener sus claves, es necesario dejar unas instrucciones para que nuestros familiares puedan encontrar las claves por si nos ocurre algo cualquier día. Una de las opciones es dejar varios pendrives en varios lugares donde almacenemos la clave de nuestras criptomonedas o parte de ellas y posteriormente tendremos que dejar también unas instrucciones sobre cómo usar esas claves.

Esta es una de las opciones, aunque podemos ser ingeniosos y pensar otra (¿un tatuaje y posteriormente unas instrucciones en papel acerca de cómo usar la clave tatuada?, por ejemplo). El caso es difícil delegar la clave a algo tan inseguro como un pendrive en un cajón, una clave donde podrías tener millones de euros almacenados.

Otra opción es usar la web Dead Man’s Switch. Cada cierto tiempo este portal verifica si estás vivo teniendo que pulsar un botón, como los conductores de tren en sus travesías. De no hacerlo, enviará un correo electrónico a la persona o personas a las que quieras enviar las instrucciones acerca de cómo encontrar la clave y cómo usarla.