Una patente de Uber revela que podría estar trabajando en una Inteligencia Artificial que avisa si estamos borrachos. Y ya de paso, te recomienda un Uber, claro.

La conducción bajo los efectos del alcohol sigue siendo uno de los grandes motivos de accidentes y muertes en las carreteras; pese a los controles policiales y a la concienciación social, no parece haber fin para este problema.

En muchas ocasiones, es porque el propio conductor cree que “controla”, y que no está tan bebido como cree; esta falsa confianza en si mismo puede provocar desgracias. Pero, ¿y si nuestro propio smartphone nos pusiese los pies en la tierra?

Es el concepto cuya patente ha solicitado Uber en la oficina de patentes de los EEUU; se trataría de un sistema capaz de usar aprendizaje automático para conocer el estado del usuario.

Uber trabajaría en una Inteligencia Artificial que avisa si estamos borrachos

Aunque la definición de “estado” es muy amplia, parece que Uber quiere centrarse en saber si el usuario está en condiciones para conducir; y eso incluye saber si está ebrio.

Claro, que saber eso sin un alcoholímetro es harto complicado; y aunque Uber lanzase uno, no hay ninguna garantía de que la gente lo usase. Ya podemos comprar detectores de alcohol, pero eso no ha impedido que siga la conducción en estado de ebriedad.

Por eso, el sistema ideado por Uber se centraría en analizar el comportamiento del usuario, usando datos como la localización o la velocidad a la que vamos andando. Pero va mucho más allá, analizando detalles que podrían pasar desapercibidos; como la precisión al pulsar en botones de la interfaz, la velocidad con la que escribimos, la manera en la que interactuamos con la interfaz, o incluso el ángulo en el que estamos cogiendo el dispositivo.

Según Uber, con todos esos datos su IA sería capaz de saber si estamos borrachos. Para Uber, la aplicación de este sistema no sería sólo avisar al usuario, sino especialmente a los conductores; y es que nadie quiere que le vomiten en su coche.

Por ejemplo, nos podría pedir automáticamente un Uber con un conductor con experiencia o entrenamiento en tratar con clientes borrachos. O incluso puede que Uber se niegue a darnos servicio. Aunque en ese caso, nos preguntamos si no sería algo peligroso: un usuario borracho al que se le niegue el servicio podría intentar conducir un coche.

Sea como sea, por el momento esta no es más que una patente. Podría hacerse realidad o no, pero está claro que en Uber están pensando en ello.