Julian Assange deja de dirigir WikiLeaks, pero seguirá implicado

Julian Assange, el hombre que lleva 6 años recluido en la embajada de Ecuador por haber revelado secretos de la política exterior de Estados Unidos repartidos en 250 000 documentos, donde se plasmaban cosas gravísimas, como que EEUU podía espiar el teléfono de políticos de otros países (y, de hecho, lo hacía).

Para unos es completamente un villano; para otros, un héroe; hay quien piensa que es tan solo un cuñado, sobre todo después de haberse metido a opinar y ser un férreo activista pro-referéndum catalán, a cambio de dinero, según algunos medios. Pero la realidad es que, dejando temas políticos a un lado, ha revelado importantes y comprometedores documentos a lo largo de varias décadas.

Ahora, ha anunciado que relega de la dirección de WikiLeaks, el sitio web donde ha ido colgando estos últimos años muchos de estos documentos. El director, que ha sido calificado innumerables veces como autoritario, sobre todo por Birgitta Jónsdóttir, diputada islandesa y colaboradora inicial de WikiLeaks, seguirá implicado en el proyecto, no obstante.

Julian Assange dejará de estar al cargo de WikiLeaks por inconexión

El motivo principal por el que Assange ha decidido dar un paso atrás es principalmente porque la embajada de Ecuador en Londres le tiene incomunicado desde hace meses, precisamente para evitar conflictos políticos por las opiniones que suelta en Internet. De hecho, si entras a su Twitter, verás que lleva sin comunicarse por ese medio desde febrero de este año, a pesar de que anteriormente era un usuario que podríamos haber calificado de muy activo.

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Cuando el Gobierno de Quito decidió cerrarle las comunicaciones, incluso muchos medios difundieron al noticia de que podría haber muerto o que había sido extraditado a la justicia estadounidense.

Las únicas personas con las que puede comunicarse son sus abogados. Este es, en realidad, el resultado de no haber hecho caso a los reiterados avisos de la embajada: o deja de generar problemas diplomáticos, o se plantearán incluso dejar de dar asilo al hacker. «La situación es muy grave. Está llegando a un punto crítico», según una fuente interna en declaraciones a Reuters.

A cambio de Assange, ahora estará al mando Kristinn Hrafnsson, un periodista de investigación. Anteriormente, el periodista islandés ya estuvo a cargo de la publicación cuando Julian fue arrestado en 2010. «Condeno el tratamiento de Julian Assange que lleva a mi nuevo cargo, pero acepto la responsabilidad de asegurar la continuidad del importante trabajo basado en los ideales de WikiLeaks», ha explicado el nuevo director de la plataforma.