Con los AirPods, Apple completó su revolución en el sector del sonido; que inició cuando quitó el jack de audio de los iPhone. Un movimiento arriesgado, pero que Apple espera que merezca la pena gracias a la cantidad de posibilidades que ofrecen los AirPods; algo más que unos auriculares inalámbricos.

Una de las fortalezas de los AirPods es simplemente pertenecer al ecosistema de Apple; y las mejoras que puede recibir con el tiempo. Con iOS 12 vimos un buen ejemplo de estas ventajas, con la implementación de “Escucha en directo”; esta nueva función, implementada en septiembre, convierte a los AirPods en audífonos.

Es una tecnología muy ingeniosa. Consiste en amplificar el sonido ambiente y reproducirlo directamente en los auriculares; es decir, tal y como funciona un audífono tradicional, pero sin necesidad de comprar otro aparato. Funciona usando el micrófono direccional presente en el iPhone; el sonido se amplifica y se envía a los AirPods.

Espiar con los AirPods es muy fácil

No hace falta tener problemas auditivos para usar esta tecnología. Puede simplemente que estés en un sitio ruidoso y quieras escuchar la televisión o a una persona; o al contrario, que estés en un museo u otro lugar silencioso y quieras hablar con alguien sin alzar la voz.

Sin embargo, tal vez con lo que Apple no contaba es que esta función también tiene usos más maliciosos. Es algo que ahora está descubriendo mucha gente en redes sociales, principalmente gracias a este mensaje de @arnoldcrndo. Y es que la función de Escucha en directo también se puede usar para espiar a distancia.

Es algo que cualquiera con un poco de “mala idea” ya habrá descubierto. Lo único que tenemos que hacer es dejar el iPhone en la zona en la que estén las personas que queramos espiar; activamos la función y empezaremos a escuchar su conversación, prácticamente como si fuésemos parte de ella.

Para activar la función, sólo tenemos que añadir la opción “Audición” al Centro de Control si no la tenemos aún. Sólo tenemos que ir a “Ajustes” y “Centro de Control”, donde entraremos en “Personalizar”.

Por último, sólo tenemos que pulsar en el icono de la oreja que aparece en el centro de control cuando tenemos los AirPods conectados.

No es la única aplicación “maliciosa” de esta función. También puede ser usada para comunicarse a distancia sin que nadie se de cuenta; por ejemplo, para hacer trampa en un examen, aunque nos preguntamos cuántos profesores permiten que los alumnos usen auriculares.

Por supuesto, Apple no publicita esta función con esos propósitos; y cabe preguntarse si realmente puede hacer algo para evitar este tipo de usos sin sacrificar la utilidad de esta función.