Después de varias horas de rumores, el presidente estadounidense, Donald Trump, ha declarado el estado de emergencia a escala nacional. Es una medida que otorga más poder al gobierno federal para tomar decisiones rápidas frente a la expansión del coronavirus.

Justo después de otorgarse estos poderes, Trump ha anunciado algunas de estas medidas, entre las que se encuentran la expansión de otras que ya tomó, como las restricciones de entrada desde Europa, además de impulsos económicos.

Pero tal vez la parte más sorprendente del discurso fue el momento en el que Trump implicó a Google en la lucha contra el coronavirus. Aunque los detalles son muy escasos en estos momentos, todo indica que Google ayudará a informar a la ciudadanía y a facilitar la distribución de pruebas para el COVID-19.

Google luchará contra el coronavirus en EEUU

Por el momento, la única tarea confirmada para Google es la creeación de una página web dedicada exclusivamente al coronavirus; la idea es que sea el centro de información para todo lo relacionado con la enfermedad.

La página incluirá cuestionarios para averiguar si los visitantes tienen síntomas que podrían indicar que están infectados; estará abierta para cualquiera que crea que tiene los síntomas relacionados. Si la página llega a la conclusión de que los síntomas son parecidos a los del coronavirus, mostrará información sobre cómo conseguir una prueba de diagnóstico.

Estas pruebas se realizarán en sitios designados para tal efecto, accesibles por coche; la idea es que los usuarios puedan realizarse las pruebas y recibirán los resultados entre las siguientes 24 y 36 horas.

Los kits de prueba, la prioridad

La disponibilidad de los kits de prueba para el coronavirus, y su coste asociado, ha sido una de las críticas que la administración Trump ha recibido desde el principio de la crisis. Con esta asociación con Google, el objetivo es que cualquier persona que sospecha que pueda estar contagiada tenga acceso a la prueba.

Por el momento no hay muchos detalles sobre cómo será la página web, ya que Google no ha realizado declaraciones al respecto; tampoco se sabe qué tecnologías usará, ni el coste que puede suponer para el usuario, si es que lo tiene.

Según Trump, Google tiene dedicados unos "1.700 ingenieros" sólo para crear la página web, y que ya ha conseguido un "tremendo progreso".

La colaboración de Google por el momento parece que será únicamente a este nivel; y que sus divisiones dedicadas a la ciencia y la investigación no están inmersas en este proyecto. El desarrollo de Inteligencia Artificial de Google ya ha conseguido grandes logros para detectar algunas enfermedades como el cáncer.